Alcaldía no retirará los bloques de La Parada

La Alcaldía de Lima no retirará los bloques de concreto que bloquean los accesos a La Parada hasta que no haya una respuesta a la apelación presentada contra el controvertido fallo del juez Malzon Urbina que dispone el retorno de los mayoristas a dicho centro de abastos.

Así lo sostuvo la alcaldesa Susana Villarán, quien recordó que la acción legal de la comuna capitalina “tiene carácter suspensivo”, lo que –según dijo– deja sin efecto el hábeas corpus de los comerciantes.

“Esto tiene que ser revisado en segunda instancia y esperamos que se anule (el hábeas corpus) porque queremos que los alimentos se vendan en un espacio limpio y seguro”, dijo.

Del mismo modo, desmintió que alguno de los 678 vendedores de Santa Anita haya regresado a La Parada. Destacó que en unos meses, 2,000 minoristas se instalarán en “La Tierra Prometida”.

LA DENUNCIARÁN
Al conocer estas declaraciones, Ida Ávila, representante de los comerciantes de La Parada, anunció que hoy presentarán una denuncia contra Villarán por desacato a la autoridad.

También dijo que si el Poder Judicial le da la razón al municipio, ellos no cumplirán este mandato amparándose en el mismo recurso legal que usa el municipio. “Esperaríamos el fallo final. La ley tiene que ser igual para todos”, sentenció la dirigente.

Reiteró que no se moverán del lugar para no perder el derecho de posesión.

En tanto, en La Parada, la Policía ya abandonó la vigilancia de las puertas del mercado. Cada día llegan más comerciantes y aumenta considerablemente el comercio. “Antes vendía por kilos, pero ayer coloqué una tonelada de cebollas”, manifestó Jhonatan Alarcón, quien ocupa el puesto 570.

TENGA EN CUENTA

- Rafael Gómez, presidente de la Empresa Municipal de Mercados de Lima, dijo que los comerciantes de Santa Anita que regresen a La Parada tendrían que salir del primer centro de abastos porque así lo establece el contrato.

- Además, señaló que en seis meses estaría listo el mercado minorista “La Tierra Prometida’, que también se ubica en Santa Anita, a donde se trasladarían 2 mil vendedores que trabajan en La Victoria.