El congresista aprista Javier Velásquez Quesquén consideró que el pedido hecho ayer por el expresidente Alberto Fujimori de cumplir lo que le resta de su condena de 25 años en arresto domiciliario es “una figura conveniente” y una “salida política” que debe ser evaluada.
“Que (Fujimori) pueda pasar a su domicilio es una salida política muy importante que hay que evaluar. Es cierto que seguramente hay discusiones de carácter legal, pero es un tema político. Eso tiene que determinarlo el juez que lo condenó. Yo creo incluso que sí habría que afinar una legislación para esto suceda, la democracia tiene que generar los mecanismos”, dijo en Canal N.
Por su parte, el legislador del PPC Juan Carlos Eguren calificó el pedido de Fujimori de “disparate jurídico” pero coincidió con Quesquén en aclarar que es una movida política *que podría ser vista desde el propio Congreso.
“Es un pedido político y muy poco jurídico. Lo que hay es arresto domiciliario para procesados, no para condenados. Pedir algo que no existe es un disparate jurídico pero políticamente está la acción porque estamos conversando de él”, opinó.
“Lo que procedería es que su bancada presente una iniciativa legislativa para que se cree la figura de la prisión domiciliaria”, añadió, tras asegurar que sería “interesante” analizar esta opción siempre que esté enmarcada en un política general de despenalización del Gobierno.
“Personas enfermas y adultas que puedan ir a su domicilio en un régimen penitenciario y dejar de costarles al Estado puede ser interesante”, finalizó.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.