CIUDAD DEL VATICANO (EFE).– El papa Francisco vuelve a sorprender pues celebrará la misa de Jueves Santo –el próximo 28 de marzo– en un centro penal de menores de la localidad romana de Casal del Marmo, informó el Vaticano.
El pontífice argentino rompe con la tradición ya que, hasta ahora, la Misa Crismal del Jueves Santo solo se realizaba en la Basílica de San Pedro.
La Santa Sede refirió que cuando Francisco era arzobispo de Buenos Aires solía celebrar esta misa en una cárcel, en un hospital o en una casa de acogida para pobres o personas marginadas.
Con la celebración de dicha misa, “el papa Francisco continúa con esta tradición, que debe caracterizarse por un contexto de sencillez”, añadió el Vaticano.
El Santo Padre recibió ayer al argentino Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz, quien descartó tajantemente que el pontífice haya sido cómplice de la dictadura militar de su país (1976-1983).
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