RÍO DE JANEIRO (AFP).– El papa Francisco, que enfrenta el desafío de revitalizar la Iglesia, pidió a cientos de miles de jóvenes católicos que lo aclamaron en la playa de Copacabana conservar la fe pese a los malos sacerdotes.
“Jesús se une a tantos jóvenes que han perdido su confianza en las instituciones políticas porque ven egoísmo y corrupción, o que han perdido su fe en la Iglesia, e incluso en Dios, por la incoherencia de los cristianos y de los ministros del Evangelio”, dijo el papa en un discurso, al terminar de presidir el Vía Crucis celebrado en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ).
“¡Cuánto hacen sufrir a Jesús nuestras incoherencias!”, exclamó el pontífice ante un mar de peregrinos.
“En la cruz de Cristo está el sufrimiento, el pecado del hombre, también el nuestro, y él acoge todo con los brazos abiertos, carga sobre su espalda nuestras cruces y nos dice: ¡Ánimo! No la llevas tú solo”, añadió Francisco.
El primer papa latinoamericano de la historia, entronizado en marzo, enfrenta el desafío de renovar una Iglesia en crisis tras escándalos de corrupción y pedofilia, y de frenar la sangría de fieles mientras crecen las iglesias pentecostales y el laicismo.
BAÑO DE MASAS
Francisco cumplió al pie de la letra su prédica de sacar la Iglesia a la calle, paseándose también en la mañana por el centro de Río en la primera mañana sin lluvia desde hace varios días. Después, almorzó con 12 jóvenes de varios países. En la noche, el papa presidió el Vía Crucis, en el que participaron 280 actores y voluntarios.
TENGA EN CUENTA
- Unos 7 mil soldados serán desplegados el fin de semana para garantizar la seguridad del Papa y de los fieles en Río de Janeiro.
- La peregrinación de hoy y la misa de mañana son las actividades principales.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.