La oposición venezolana denunció el martes que el gobernador Henrique Capriles recibió amenazas de agresiones antes de suscribir el lunes su candidatura para los comicios del 14 de abril, por lo que envió un delegado para realizar el trámite ante el Consejo Nacional Electoral (CNE).
“La información que tenemos, incluso de cuerpos de inteligencia del propio Gobierno, es que se planeaba no solamente una emboscada y saboteo, sino incluso agredir y atentar contra Henrique Capriles”, dijo en conferencia de prensa el jefe de campaña del líder opositor, Henri Falcón.
Capriles, gobernador del estado de Miranda, formalizó su postulación a través de representantes de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), sin manifestaciones como lo hizo su rival, el presidente encargado Nicolás Maduro, por “respeto al luto” ante la muerte de Hugo Chávez, según dijo.
Pero Falcón, también gobernador del estado de Lara, indicó que en la mañana del lunes Capriles recibió unas fotografías —que también circularon en las redes sociales— en las que su imagen aparecía en una pantalla de televisor, a la cual apuntaban dos manos que empuñaban armas de fuego.
Advirtió que la MUD presentará una denuncia en el Ministerio Público y llamó al Gobierno a pronunciarse sobre los hechos y actuar con “prudencia” en un “momento muy agudo” en el país”.
Sin referirse a la denuncia, Maduro calificó como un “gesto de debilidad y de irresponsabilidad” que Capriles Radonski mandara un enviado al CNE “sin dar la cara”, al tiempo que garantizó “la paz y respeto absoluto a todos los actores políticos”.
La oposición “quiere la violencia, su plan es sabotear el país (…), pero sobre todo su plan es presentarse como víctimas. Yo le pido a todos los hombres y mujeres de la patria (…) seamos garantes del respeto de los derechos democráticos y de la paz”, expresó al canal oficial VTV.
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