Se hizo justicia. El Juzgado Penal Colegiado de Chincha ratificó la sentencia que, en primera instancia, condenó a Atilio A. Rondón Santiago a cadena perpetua, por el delito de violación sexual contra su hijastra.
El acusado habría abusado de la menor en el interior de su vivienda, ubicada en el asentamiento humano Las Casuarinas, en Chincha. Rondón Santiago fue puesto en manos de la justicia luego de que la pequeña denunciara al agresor con ayuda de sus hermanas.
El juez superior Osmar Albújar rechazó la apelación del sujeto por los resultados del médico legista y por el testimonio de la víctima.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.