Invierno 2013 y la “depre”

Hace muchos años tuve la oportunidad de entrevistar al muy conocido doctor José Luis Pérez Albela, quien decía que el cielo plomo de Lima aploma y que ello impacta en el ánimo.

Parece que hay una parte interna de nosotros que se estimula en presencia de la luz del Sol y que reacciona de modo opuesto en tiempos grises y opacos.

Pues bien, el invierno 2013 tiene todos los visos de ser gris y opaco.

El invierno de la costa peruana depende enteramente de las temperaturas del mar para establecer su intensidad. Si el mar presenta aguas más cálidas que lo habitual, generalmente es tibio y con mayor presencia de brillo solar que un invierno considerado normal.

Si, en cambio, como sucede este año, todo el océano frente a nuestra costa está más frío que lo habitual, entonces es a la inversa: más frío que lo normal y menos sol. ¿Cuánto menos sol? Pues bien, hay registros entre agosto y setiembre de años fríos donde Lima (y, en general, el tramo Huacho-Cañete) puede estar más de 10 días seguidos sin ver el Sol.

No conozco otros lugares que, teniendo tantas horas de luz en el invierno, esta se encuentre obstaculizada por nubes. Esta condición se daría en este invierno y podría aplomar el ánimo.