Muchos padres tienen este problema: no saben cómo convencer a sus hijos de que deben consumir frutas y verduras. Puede convertirse en toda una odisea, para ser honestos. Lo cierto es que hay formas para conseguir esta meta de manera práctica e inteligente. Una de ellas es ofrecerles extractos. Según Adriana Carulla, nutricionista de Oster, si un niño bebe medio vaso de extracto de frutas o verduras en la mañana, contará con la suficiente reserva energética para afrontar la carga académica en la escuela. ¿A qué se debe? La especialista explica que la clorofila de las verduras influye en la producción de energía. Asimismo, recomienda preparar extractos de uvas, cerezas, frambuesas, moras, fresas o arándanos, a fin de estimular el sistema nervioso y mejorar el desempeño intelectual.
Por otra parte, Carulla sugiere a los padres que involucren a sus hijos en el proceso. Por ejemplo, sería estupendo que los pequeños vayan al mercado con sus papás, que escojan las frutas de su preferencia y que en casa colaboren en la preparación del extracto. Entonces, lejos de ver el consumo de estas bebidas como una obligación, sentirán que es simplemente un estilo de vida que pueden adoptar con responsabilidad. Haga la prueba.
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