Abraham Levy,Opina.21
alevy@ambiand.com
Desde marzo, las aguas del mar frente a la costa presentaron temperaturas por debajo de sus valores habituales. La acumulación de agua más fría que lo normal alcanzó tal magnitud al inicio del invierno, que la temperatura y humedad de Lima –en los primeros dos meses del invierno– ha sido comparable a la de los más fríos episodios de las últimas dos ó tres décadas.
Basta ver los cerros cerca de Lima, en Pachacamac, completamente verdes para ver la magnitud de la humedad que nos acompañó.
Pero todo viene cambiando desde la semana pasada –como ya indicamos en este periódico– en cuanto a las fuerzas frías que alimentaron el invierno. Esta semana han seguido debilitándose y a cuatro semanas de la primavera, el invierno severo se derrumba.
La razón de ello es que el motor del agua fría de la corriente peruana, conocido como Anticiclón del Pacífico se ha debilitado y se mantiene así. Con ello, la alimentación de agua fría disminuye en la costa produciendo un clima menos húmedo y más soleado. Todavía vendrán días fríos.
No obstante el último mes del invierno será más light y la primavera llegaría antes de lo inicialmente esperado (o temido).
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