¿Y el “ángel” de Comizzo?

Carlos Bernuy Flores
cbernuy@peru21.com

Los nervios a veces traicionan el equilibrio y enseñan un camino errado hacia pretextos culpando a terceros. La manera de comportarse en la banca de suplentes del técnico de Universitario, Ángel Comizzo, es prueba palpable de ello. Puede estar de lo más tranquilo, pero basta que vea lo que a su parecer es una injusticia para disfrazar los errores que viene teniendo su equipo.

“A pesar de todo, que escuchen los de la Federación y los que programan a los árbitros, Universitario va a campeonar”, dijo luego de la derrota –la segunda en tres fechas de la liguilla B– en Huánuco. Comizzo apuntaba al juez Víctor Hugo Carrillo como responsable de la caída. Apuntaba a un hombre en vez de señalar a los once vestidos de crema que tenía en cancha y a su propio orden.

Porque el juez no es culpable que Diego Chávez piense que está jugando fulbito y meta la mano en el área como si se tratara de un chiste. Víctor Hugo Carrillo tampoco empujó a Galliquio a comportarse con un ‘Tyson’ desenfrenado y agredir a un jugador del León, o forzó a Ángel Romero a aplicar un codazo criminal a un oponente. En ambos casos las tarjetas rojas estuvieron bien mostradas.

Es más, Comizzo olvida que el juez fue más riguroso con el equipo huanuqueño al considerar que dos faltas sin violencia del volante Carlos Flores significaron la doble amonestación. Días antes, los cremas perdieron con Juan Aurich en casa y la culpa tampoco fue del árbitro Miguel Santiváñez. Responsables pueden ser el defensa Néstor Duarte por hacerse expulsar por último recurso y la pésima marca de Galliquio y Saco Vértiz en el gol de Ovelar.

Seguimos retrocediendo. Ante UTC hubo un penal de Chávez sobre Ronceros en el final que el juez Manuel Garay no vio, y allí nadie dijo nada porque la ‘U’ ganó. El técnico permaneció en el lado del silencio. Empezando la liguilla, los cremas empataron 1-1 con Cienciano y el juez Roberto Mauro sancionó un correcto penal por mano (otra vez inocente) de Duarte.

Se entiende que los nervios traicionen conforme las fechas avanzan en la liguilla. Pero si la ‘U’ y su entrenador dejan de pensar que los que dirigen ocasionan derrotas en vez de los que juegan, entonces se darán cuenta que su serie es realmente accesible y el estar en el ‘Play Off’ solo depende de ellos. Claro si las manos y las rojas no ocasionan una debacle.