Álvaro Vargas Llosa: “Ollanta Humala sabe mucho más de lo que dice”

El escándalo López Meneses ha puesto en relieve que al gobierno “le interesa un pepino” la credibilidad. Así lo afirma Álvaro Vargas Llosa, quien advierte que ‘la burbuja’ del poder es peligrosa.

Sus declaraciones han despertado polémica por los fuertes calificativos que ha utilizado para referirse al gobierno. ¿Percibe “podredumbre”, “mentiras” y “trampa”?
No estoy utilizando frases agresivas, estoy diciendo cosas elementales. Si uno observa la secuencia del último mes, casi no hay una sola intervención que sea creíble de los voceros del gobierno, desde los más calificados hasta los más bajos. La última de ellas, un ministro (Figallo) que sale y dice que no se encuentran los registros de visitas en las cárceles y resulta que a los dos días aparecen y al tercer o cuarto día aparecen otros parcialmente con algunos nombres sí y otros no. Yo soy un ciudadano que no estoy en el poder ¿y qué cosa veo? Trampas y mentiras. Esa es la percepción ciudadana.

¿El gobierno debería escuchar más a la población?
Si no hace eso no podrán conducirse de un modo que sea creíble. La burbuja del poder es una cosa muy peligrosa. Cuando se aisla y se rodea de gente que solo le dice lo que quiere escuchar es muy difícil situarse en la perspectiva ciudadana. Los que estamos fuera tenemos la obligación de romper esa coraza que rodea al presidente y a su esposa y decirles la verdad. Otra cosa es que nos escuchen o no, pero cumplamos con esa obligación.

¿Cree que el gobierno está jugando al borde del abismo de la credibilidad y que con un paso en falso puede caer?
El gobierno no va a caer, eso no lo vamos a permitir…

Me refiero a la credibilidad que debe tener un gobierno
Eso sí, hace mucho rato y eso comenzó a pasar desde comienzos del gobierno cuando ellos cometieron el gravísimo error de permitir la especulación de una continuidad en el poder a través de la candidatura de la primera dama. Este fue uno de los graves errores.

¿No cree que será candidata?
Lo han negado, pero recuerda lo mucho que nos ha costado en la campaña de 2011 vencer la resistencia de la gente hacia la candidatura de Humala por los antecedentes de 2006, sobre todo porque lo vinculaban dentro de la corriente del chavismo. Nos costó muelas convencer a la gente que íbamos a monitorear escrupulosamente el período de mandato y que ellos se iban a ir a su casa después de cinco años. Si desde el comienzo del gobierno se plantea la posibilidad de que se queden en el gobierno a través de una candidatura que es ilegal y ellos permiten esa especulación y, en cierta forma, lo alimentan por casi dos años, ¿cuál es la consecuencia? La pérdida de credibilidad.

¿Y le interesa al gobierno la credibilidad?
Ese es el problema, le interesa un pepino. Dicen: ‘como estoy en el poder, no me interesa lo que opinen los ciudadanos’. Es un grave error. Tiene que importarles lo que piensen los ciudadanos porque sino terminará erosionando no solo el gobierno sino también a la democracia. El fenómeno del outsider, de la antipolítica, del antisistema está vinculado a la pérdida de credibilidad en la clase política. Cualquier presidente o primera dama, en este caso, tiene que entender que ese nexo con la ciudadanía es absolutamente esencial y fundamental. Creo que eso se perdió en alguna parte del camino.

¿Le queda la sensación de que en el tema López Meneses no se está diciendo la verdad? ¿El presidente sabe ‘algo más’?
Tengo la impresión que mucha de la gente cerca al presidente sabe mucho más de lo que dicen. A lo largo de más de dos años hemos visto a asesores del presidente colocar a sus fichas en los estamentos policiales y militares. En el caso policial, después de una razia que sacó a unos 30 generales. Si bajo esas condiciones, con ese grado de control de esas instituciones se producen estos hechos, es bastante inverosímil que no lo supiera gente de muy alto nivel.

¿Sabían pero no lo evitaron?
La pregunta es ¿Por qué lo permitieron? No fue porque ese señor no sea útil, probablemente fue porque creyeron que este señor era útil. ¿Cómo no va a ver responsabilidad en las altas jerarquías del gobierno ante una cosa así? Si esto hubiese sido en otro gobierno, probablemente hubiésemos culpado al presidente y a sus ministros. Entonces, fiscalicemos al presidente porque, independientemente que diera o no la orden, que supiera o no, permitió esta estructura bajo la cual se han producido estos hechos.

¿El presidente deberá responder sobre estos hechos?
Yo creo que el presidente y sus funcionarios formales han actuado de una manera que hacen suponer que saben mucho más de lo que nos dicen y solo eso es un factor de erosión en la credibilidad del gobierno.

Usted es muy enérgico para referirse a la influencia que tiene la primera dama…
Lo que he dicho no es en términos machistas. Creo que las funciones de la primera dama tiene unos límites que ella ha desbordado porque él (Humala) dentro de su inseguridad y falta de experiencia del mundo civil pensó que ella podría servirle de nexo con ese mundo y, en cierta forma, protegerlo de ese mundo. En algún momento ella entendió que eso le daba un margen de operación desproporcionadamente importante y gravitante y pasó a convertirse en un primer ministro en la práctica.

¿Y no cree que los ministros contribuyen con esta situación y ceden el protagonismo ante la primera dama?
Lo que pasa es que los ministros se quieren quedar en sus puestos y saben dónde está el poder. Cuando salen los ministros a declarar no le hablan al país le hablan exclusivamente al presidente y, en este caso, a su esposa. Uno nota cuando un ministro habla buscando informar o convencer al país y también se nota el momento cuando eso deja de importarles y lo único que importa es si está haciendo méritos para que en Palacio siga con mis servicios. Ese efecto es la consecuencia directa del poder desproporcionado que ha tenido la primera dama.

¿Esto deja mal parado al primer ministro?
Eso descoloca al primer ministro porque lo que solo le importa a su gabinete es que cuenten con la bendición del presidente y de su mujer, y el presidente y su mujer fomentan esa relación.

Le ha sorprendido escuchar a Pedro Cateriano, a quien usted conoce años, decir en un audio que tiene la “luz verde de la primera dama”
Él (Cateriano) tiene grandes virtudes y creo que el presidente no ha sabido necesariamente emplearlo en la función más acertada para explotar mejor sus virtudes.

¿No es para Defensa?
Si tú quieres tener una figura de combate, como Cateriano, y la colocas en un ministerio tan sensible y delicado como ese (Defensa) le vas a crear un problema. Entiendo que el presidente, que es un militar, no vea esto, pero el primer ministro tiene que darse cuenta.

¿Tal vez el premierato?
Hay muchas funciones en las que él sí podría estar, lo que sí sé es que en un momento en el que el gobierno está en situación de impopularidad y (Cateriano) cumple una función defensiva y de protección, de naturaleza esencialmente política, evidentemente el gobierno no le permite ejercer el ministerio de Defensa como normalmente se ejercería.

El gobierno la tiene fácil sin mayor oposición…
Lo que pasa es que la oposición tiene sus propios problemas. Ya conocemos lo que vive el fujimorismo y el Apra. Si el grueso de la oposición está compuesta por fuerzas tan cuestionadas, eso supone un problema no solo para ellos sino para el sistema democrático. Por eso urgen nuevos participantes en política.

Entramos a un año de elecciones municipales, ¿Cree que la alcaldesa Villarán debe tentar la reelección?
Yo he escuchado a la alcaldesa decir que no va a postular. No lo dudo que va a cumplir esa promesa.

¿Entendió el mensaje electoral con la revocatoria?
Creo que ella ha querido convencerse de que el único problema que tenía es la crítica de los medios de comunicación, cuando el tema de fondo es el problema de ineficiencia en la gestión pública.

ALAN Y TOLEDO

- Informe de la ‘Megacomisión’. “Hay una responsabilidad política en los narcoindultos, pero el delito deben probarlo. Lo que ha habido es un manejo poco inteligente del gobierno, ha transmitido impaciencia y ha dado luz a que se piense que hay persecución política. Lo gravísimo es que esto solo haya sido para cerrarle el paso a un candidato. Esto va a beneficiar a Alan García y afectará la investigación”.

- Sobre Toledo. “No extenderé ninguna acta de defunción sobre ningún político, pero si hay lógica en el Perú, Toledo no debería ser candidato en 2016. Si las fuerzas democráticas de 2001 hubiesen sido más vigilantes, quizás no se habría producido el escándalo que hoy vivimos”.

TENGA EN CUENTA

- Su padre califica de “impecable” al gobierno. “Esa frase fue una operación de la agencia Andina con dinero de los contribuyentes. Desempolvaron una entrevista a una revista española sobre otros temas que es anterior a estos hechos. Ahí hubo una referencia a la Hoja de Ruta y Andina lo ha titulado en el contexto del caso López Meneses”.