Blanquiazules la vieron negra ante Huancayo

HUANCAYO.- En Alianza hay cama. Para echarse a dormir viendo cómo el título se desvanece, para conciliar el sueño olvidando la historia, para roncar más fuerte que el grito del hincha. Hay cama para que se echen las derrotas y se cubran con el manto de la irregularidad. Esta vez fue derrota de visita, un 3-2 ante Sport Huancayo. Y van tres caídas seguidas.

El problema blanquiazul es que en su retaguardia siguen los forados. Huancayo se aprovechó de esto y con proyecciones por izquierda de Daniel Morales y con Ángelo Cruzado en el área, metió miedo.

Apunte: a los 30 segundos la tuvo Ryan Salazar y atajó Heredia. A los 5’ el golero volvió a aparecer cuando Rafael Farfán metió un zurdazo. A la tercera ya no pudo hacer nada cuando Farfán (13’) aprovechó el mal salto de Beltrán para poner un cabezazo inatajable. A pesar de la altura, los íntimos pudieron empatar cuando Aguirre, tras un servicio de Ciucci, falló lo imposible.

Cuatro minutos después Ibáñez se equivocó de arco y casi vence a Heredia. Igual hubo que sacarla del fondo a los 35’ cuando el defensa uruguayo, Cuba y Aparicio se quedaron pegados a la tierra mientras Cruzado definía de cabeza. Tras ello, a los 37’, Ciucci descontó para Alianza, también por la vía aérea.

En el complemento Valencia pareció entrar dormido, sacó a Ciucci (el mejor de la volante) y confió en Vidales y Cueto. Ninguno aportó nada. Más bien recibió el tercero cuando otra vez Farfán (59’) estuvo en el área de ‘9’ (aunque lleva el ‘7’) para añadirla. El descuento, de tiro libre indirecto de Ibáñez (72’), no fue suficiente. Alianza Lima duerme, que alguien los despierte o que los tape y cierre la puerta.