Emilio Palacio,Periodista ecuatoriano
Autor: Mijail Palacios Yábar.
mpalacios@peru21.com
Emilio Palacio es quizás el periodista ecuatoriano más crítico del presidente Rafael Correa. Tanto que tuvo que exiliarse y últimamente se ‘ganó’ una amenaza del mandatario, quien preguntó públicamente si no daban ganas de patearlo. Conversamos con el comunicador desde su exilio, en Miami, y aseguró que el narcotráfico está metido en ese Gobierno.
¿Por qué dejó Ecuador?
Llegué a Miami hace tres años. El presidente de Ecuador aseguró que el 30 de setiembre de 2010 hubo un intento de golpe y asesinato en su contra, y yo sostuve que eso era mentira en varios artículos y a raíz de uno que se llamó “No a las mentiras del presidente”, me demandó por injuria y el juez le dio la razón. La reacción internacional fue tan grande que Correa me perdonó. Pero para que yo no pueda seguir con mi trabajo de periodista me iniciaron otros juicios y crearon un clima de persecución y no me quedó más que pedir el asilo político en EE.UU.
¿En los tres años que usted está fuera de su país cómo ha cambiado la situación de la prensa en Ecuador?
Lo que (Correa) me hizo a mí se lo fue haciendo a mucha gente y medios de comunicación, con lo cual hoy en día no hay libertad de expresión. Hay cosas de las que no se pueden hablar ni tocar. A los periodistas se les obliga a ofrecer disculpas en público por lo que escriben, además de una sanción económica. Ese fue el caso del caricaturista Bonil.
Y ahora Correa lo amenazó a usted con darle de patadas.
No es nuevo. El 19 de mayo de 2007, cuando Correa tenía cuatro meses en el poder, me invitó a un debate en el Palacio de Gobierno delante de las cámaras de televisión. Él dijo en aquella ocasión que nuestra prensa no había denunciado sobre una crisis bancaria muy grande. Yo le demostré que eso no era verdad y lo conminé a qué diga –él como economista– qué había dicho sobre esa crisis bancaria. Entonces, Correa me respondió que yo no tenía que decir nada porque era profesor. Le contesté: ‘cómo que no tenemos nada que hablar de los problemas del país’. Y ordenó que me saquen. Aunque primero me mandó a la casa de la verga (a la mierda). Literal.
La última amenaza del presidente Correa fue por información que usted dio y que capaz era delicada para el Gobierno.
Hace cuatro meses dije que Correa había hecho un viaje a Nueva York, lo que no es nada malo. Lo que ocurre es que yo lo conté porque en ese momento en el país la gente no sabía dónde estaba el presidente. Una fuente del gobierno me informó que se encontraba en EE.UU. Cuatro meses después de que cuento lo del viaje, la DEA captura un avión en La Florida. Esa nave es de una compañía norteamericana cuyos propietarios son ecuatorianos. Y uno de ellos fue funcionario del gobierno y director de la Dirección de Aviación Civil en el Ecuador, y salió del Gobierno a raíz de un escándalo de narcotráfico. Entonces, yo dije eso, que la DEA había capturado ese avión. No indiqué que haya hecho nada malo. Y sí expresé que esta nave capturada es un Gulf Stream II y que recordemos que hace cuatro meses el presidente voló a Estados Unidos en Gulf Stream II.
¿Y su experiencia periodística qué le dice sobre esta coincidencia?
Si digo algo van a decir que estoy especulando. Lo que sí puedo decir es que el viaje de Correa a Nueva York no era para algo ilegal. El presidente había ido para una negociación secreta, reservada. Ahora, tampoco me vengan con que este gobierno es un gobierno de angelitos. A este gobierno la cocaína le sale por los oídos.
¿En qué se basa para señalar ello?
Las FARC le dieron US$400 mil a la campaña de Correa y 40 kilos de cocaína fueron embarcados a Italia en una maleta diplomática en la Cancillería ecuatoriana. Meter cocaína en una valija diplomática es lo mismo que meter droga en el avión presidencial. Y no hay un solo acusado ni capturado en Ecuador. También hay fotos donde se le ve a la hermana del presidente reunida con el jefe de un cártel del narcotráfico. Otro ejemplo es José Ignacio Chauvín, quien fue su secretario de gobierno y después se descubrió que estaba vinculado al narcotráfico. Y podría seguir. Podemos discutir cuál es el papel de Correa en ese proceso o hasta qué punto él está involucrado o no, esos detalles yo no los sé, pero que en este gobierno el narcotráfico está metido, está metido.
¿No era más fácil para el Gobierno mantener silencio sobre el viaje y la intervención de este avión?
Lo que ocurre es que esto del avión, que se enoja cuatro meses después, es nada más el pretexto de Correa. Lo que ocurre es que yo estoy denunciando un tema que la prensa ecuatoriana no puede hacer: la dolarización en el Ecuador está a punto de caer. Es tan monumental el gasto público que ya la plata no alcanza. Es el inicio de la devaluación y la inflación.
¿Ecuador está rumbo a convertirse en una segunda Venezuela?
Esto se va agravar y eso es lo que Correa está tratando de parar. Es un mensaje a la prensa: cuidado con hacer eco de lo que Emilio Palacio esté escribiendo.
¿Correa volverá a ser presidente?
Él ya perdió las elecciones. Es decir, en febrero hubo comicios municipales y los perdió. Para las elecciones de 2017 ya están preparados. Las van a perder, pero las ganarán con fraude.
¿Correa apunta a llenar el espacio de Hugo Chávez en Latinoamérica?
No, y eso lo tiene amargado, porque él quería hacer eso. No ocurrirá jamás, porque no tenemos la plata que tenía Chávez. Lo otro es la relación con los Castro, que no confían en Correa, porque saben que es mentiroso. Un día negocia con Cuba y al otro con Washington. Y no le van a dar el aval.
AUTOFICHA
- “Todos los medios de prensa están amenazados en el Ecuador. En las ruedas de prensa del presidente, a los periodistas los llaman un día antes, les dicen a ver qué quieren preguntar y usted manda la pregunta y se la califican. Y le responden si está autorizada o no”.
- “Quedan muy pocos medios independientes. Hay autocensura y cuando no hacen caso, les cae la multa y los obligan a ofrecer disculpas. A Correa le gusta eso. Él ha aprendido eso del estalinismo: hay que matar al adversario y su honra”.
- “Rafael Correa inventó un intento de golpe de estado. Yo presenté informes oficiales donde se lee que el presidente no estuvo en ningún momento secuestrado, ni amenazado ni en peligro ni nada. Correa es un farsante, que miente con una facilidad increíble”.
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