Una monja salvadoreña de 32 años, quien dijo que no sabía que estaba embarazada, dio a luz el pasado martes en un hospital de la ciudad italiana de Rieti, a 80 km al noreste de Roma, a donde fue trasladada en ambulancia aquejada por “fuertes dolores en el vientre”, según informó la prensa italiana.
El parto tuvo lugar durante la noche del pasado martes, cuando los servicios de urgencias recibieron el aviso de las monjas del convento de Discípulas de Jesús, donde funciona un asilo de ancianos, quienes decidieron llamar al número de emergencias asustadas por los dolores abdominales que su compañera aseguraba padecer.
La monja fue trasladada en ambulancia al hospital de San Camilo de Lellis, en Rieti, donde dio a luz a un niño de tres kilos y medio que se llamará Francisco, en honor al Papa.
Cuando los servicios sanitarios llegaron al convento de Rieti, las religiosas aseguraron estar convencidas de que se trataba de un “dolor estomacal” y que no estaban al tanto del estado de gestación de su compañera.
“¿Pero cómo es posible? No podríamos imaginar algo como esto”, aseguraron las religiosas del convento italiano.
Según los medios locales, la monja, que está recuperándose del parto, aseguró que va a ocuparse de su hijo y ya está recibiendo ropa y otros regalos para el bebé.
Por su parte, sor Herminia, la madre superiora de las Discípulas de Jesús de Rieti, aseguró que la monja salvadoreña “ha hecho todo sola” y subrayó que el resto de religiosas del convento no se había dado cuenta de nada.
“No ha sabido resistir a la tentación pero no ha hecho ningún mal a nadie. No entiendo por qué se presta tanta atención a esta historia”, añadió.
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