La primera dama de Francia, Valérie Trierweiler, desea salir “lo más dignamente posible” de la situación provocada por la revelación de la relación del presidente François Hollande con una actriz, indicó hoy su abogada al portal web del diario Le Figaro.
“El presidente de la República y mi cliente reflexionan”, declaró Frédérique Giffard, recalcando que “la decisión solo les pertenece a ellos”.
“Es muy difícil para Valérie Trierweiler permanecer serena ante la presión mediática y política”, dijo la letrada, señalando que su cliente es “consciente de que se impone una aclaración”.
François Hollande, de 59 años, prometió “aclarar” la situación de su pareja antes de su visita oficial el próximo 11 de febrero a Estados Unidos.
“Ella desea realmente que todo este caso pueda ser resuelto para salir lo más dignamente posible”, añadió la abogada de Valérie Trierweiler.
Giffrad denunció una “escalada mediática completamente loca”, y estimó que “algunos franquean los límites planteados por el derecho, sin ningún escrúpulo por Valérie Trierweiler ni su familia”, precisando, según Le Figaro, que estudiaba la posibilidad de entablar demandas judiciales.
La abogada dijo que “imaginar que mi clienta pueda querer instrumentalizar su angustia es totalmente contrario a su personalidad y a su manera de concebir las relaciones humanas, basada en la franqueza”.
Según el diario Valérie Trierweiler, madre de tres hijos, está también preocupada por su situación material después de haber renunciado a animar emisiones sobre un canal de televisión, y solo dispone de su salario en el semanario Paris Match.
“Para justificar esa decisión de seguir siendo periodista ella siempre ha explicado que quería conservar al máximo su independencia financiera”, recordó su abogada.
“Contrariamente a lo que algunos pretenden, mi clienta no desea para nada alimentar la polémica y conserva el sentido de sus responsabilidades”, añadió, e indicó que Trierweiler pretende organizar su vida a la salida del Elíseo, encontrar un lugar donde vivir sin ser molestada por los ‘paparazzi’ y reconstruir su futuro profesional.
“Valérie sigue siendo una mujer de izquierda. No pienso que ella desee que las dificultades actuales empañen el mandato de François Hollande”, concluyó.
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