"Soy desinhibida, cuando me gusta alguien se lo digo"

Mayra Couto,Actriz
Autor: Gonzalo Pajaraes.
gpajares@peru21.com

Su romance televisivo con Andrés Wiese, en la ficción de Al fondo hay sitio, conmovió a la audiencia. Hoy, Mayra Couto –‘Grace’ para los seguidores de la serie– vive sola, ha madurado, no tiene pareja, quiere dedicarse a sí misma y a su carrera. Además, protagoniza Avenida Q, el musical, la obra de teatro para adultos –pero hecha con títeres– que se presenta en el auditorio del colegio Juana Alarco (cuadra 22 de la Av. Benavides, Miraflores). Allí hace dos papeles: ‘Lucy, la zorra’, una cabaretera, y ‘Kate’, una chica tranquila pero, a veces, desinhibida.

¿Qué tan peruana te sientes?
Mucho, por eso me molesta que mucha gente quiera perder sus raíces, transformarse en otra persona. Pero no creo que haya un elemento común entre las chicas peruanas. Somos muy diversas y hay que evitar el prejuicio.

¿Cómo tomas la fama?
Te cotiza mejor en el mercado. Y también sirve para ayudar a la gente. Ese es su lado bueno. El lado que no me gusta es el de la intromisión en nuestras vidas: una no puede ni comer, perdemos nuestro espacio. Si decimos algo, nos juzgan, muchas veces sin derecho. Me molesta que digan que sacrificar nuestra privacidad es “el precio a pagar por la fama”. No busco fama, no busco escándalos, no quiero que me paguen por dar una entrevista.

Imagino que, a tus 17 años, no estabas preparada para esta exposición mediática…
Ni siquiera estaba segura de ser actriz. Hasta tercero de secundaria quería ser doctora. En realidad, es como tener un hijo: una nunca termina de estar preparada. Felizmente, tengo una familia que me jala hacia la realidad si por allí me pongo a volar por la fama, algo que pasó mucho, pero pasó.

¿Qué te gusta?
Contar historias. Aunque Al fondo hay sitio no es la historia que me gustaría contar, supe adaptarme a ella y sé también que a mucha gente le hace bien, le completa el día.

Has dicho que no eres como Grace, tu personaje en la serie.
Soy y no soy. ‘Grace’ es Mayra cuando ella llegó a Al fondo hay sitio pero, desde entonces, Grace ha evolucionado muchísimo menos de lo que Mayra lo ha hecho. Gracias a mi contacto con gente de la serie que tiene mucho mundo, he aprendido muchas cosas y me he deshecho de muchos prejuicios. Antes no me gustaban ni me reía con ciertas malcriadeces (ríe). Al fondo hay sitio me ha dado calle, me ha dado mundo. Si antes no compartía una idea con otra persona, pensaba que ella estaba equivocada. Hoy soy más tolerante.

También encontraste el amor en la serie…
Tuve una relación con Junior Silva (más conocido como ‘Pollo Gordo’), pero empezamos seis meses antes de empezar a grabar Al fondo… Tampoco creo que haya encontrado el amor con él (ríe).

Eras la envidia de muchas chicas por besar a Andrés Wiese, ‘Ricolás’…
Entre nosotros hay una química muy bonita. Andrés y yo no somos patas ni tenemos tanta afinidad, pero a la hora de actuar aparece una cosa muy bonita. Nuestra relación en la serie fue ideal, romántica, hermosa. El amor que hoy vivo en la serie –con Gustavo Adolfo– es más serio, maduro, más producto de una decisión que del encanto.

¿En la vida real te han sacado la vuelta?
Que yo sepa, no.

¿Has sido infiel?
Sí, pero fue una tontería, porque era muy pequeña. Tenía 14 años.

¿Eres desinhibida?
Depende. Cuando me gusta un chico, voy y se lo digo. Y lo hago desde los 12 años. Es más, yo pensaba que las relaciones se manejaban así. Pero creo que esa etapa ya pasó porque en estos días me gusta un chico y me da tanta vergüenza que no puedo ni mirarlo.

Si no te atreves, quizás te pierdas de algo bueno…
Quizás, pero hoy tampoco tengo mucho tiempo, así que ya se me pasará. Hoy prefiero vivir, y quizás el amor no me deje seguir adelante.

¿Alguna vez te has quedado en la casa de tu novio?
No, no me dejaban (ríe). Nunca me han dejado ir a una pijamada, solo una vez me quedé fuera de mi casa, pero con permiso. Hoy vivo sola… pero tampoco tengo novio (ríe). No iría a un hotel, no tanto por la fama, sino porque es bastante feo ir a un lugar donde la gente entra y sale.

¿Eres conservadora?
Estoy tratando de despojarme de eso.

*¿Convivirías? *
Sí, pero ahora no, porque necesito centrarme en mí, en mis objetivos. Antes, el amor hizo que dejara de hacer cosas que ahora me pesan: faltar a clases, pelearme con mis viejos. Además, luego me dije: “Ay, no era amor, por qué hice esto”. Igual lo viví y lo disfruté, pero hoy no me quiero distraer. Hoy me necesito sola, independiente, sin enamorado.

AUTOFICHA

- Tengo 21 años. Desde los 17 estoy en Al fondo hay sitio. Tuve miles de barrios, estudié en varios colegios, terminé en un colegio nacional, el Juana Alarco de Dammert.

- Soy bastante impulsiva y, sí, por salir con alguien a veces no fui a clases. No, no me he quedado en la casa de mi enamorado. No me dejaban (ríe).

- Solo he tenido un enamorado: Junior Silva (‘Pollo Gordo’). En todo caso, ha sido el único importante, el único al que presenté en mi casa… solo tengo 21 años.