Aún se espera el milagro

La esperanza es lo último que se pierde. El rockero argentino Gustavo Cerati continúa su lucha incansable de aferrarse a la vida al cumplirse hoy el tercer aniversario en que cayó en estado de coma tras sufrir un accidente cerebrovascular.

El exlíder de Soda Stereo permanece estable en una clínica de Buenos Aires. “Continúa sin cambios neurológicos, clínicamente estable, sin intercurrencias agudas y sin lesiones agregadas”, señala el informe médico. Los galenos indicaron que se le realiza “movilización kinesiológica pasiva y estimulación permanente en las áreas de terapia ocupacional y musicoterapia”.

La familia del músico agradeció “el respeto y las demostraciones de afecto” que recibe. “Han pasado tres años y él está intacto físicamente. Gustavo nos escucha, a mí me aprieta la mano. A mí y a sus hijos nos reconoce”, reveló su madre, Lilian Clark.

“Todos somos cuerpo y alma, del cuerpo se están ocupando muy bien los médicos del ALCLA, que hacen lo imposible por Gustavo, y del alma nos estamos ocupando quienes lo queremos”, destacó.

De acuerdo con el diario Perfil de Argentina, Cerati mantiene una rutina diaria que comienza a las 9 de la mañana, cuando las enfermeras entran a su habitación para levantarlo y sentarlo en un sillón especial que tiene frente a su cama. Recibe todo tipo de estimulaciones que le hacen mover algunos músculos de su cuerpo. Allí lo visten, le ponen zapatillas y una camiseta. Por la tarde repiten la operación de sentarlo y lo dejan ahí hasta las 8 de la noche. De vez en cuando lo afeitan y le cortan el cabello. Solo pueden ingresar sus familiares directos a través de un detector de huellas dactilares ubicado en la puerta de la habitación.

‘EX’ SODA NO LO VEN
Entre los visitantes se encuentran sus músicos, el guitarrista de la banda Sumo y los cantantes Leo García, Fabiana Cantilo y Ricardo Mollo. En cambio, no se ve a Zeta Bosio ni a Charly Alberti, sus excompañeros de Soda Stereo.

RESPONDE A ESTÍMULOS
Ese mismo círculo es el que lo incentiva a dar respuestas. Dicen que, muchas veces, cuando su madre llega, el cantante mueve la cabeza en dirección a la entrada, o que traga saliva cuando alguien se lo pide. Incluso le pusieron un casete con la voz de su padre, quien era locutor, y se produjo la mayor respuesta: le subieron de golpe las pulsaciones, tanto que hubo que descartar la estrategia. “Escucha, pero lo que no sabemos bien es cómo lo procesa”, aseguran. Una persona que va seguido a verlo manifestó: “Llegas y lo ves sentado, como si estuviera durmiendo. Se ha dicho tanto de él, está hermoso”.

El personal de la clínica es muy respetuoso de la privacidad de Cerati y sabe que no puede dar información extra ni permitir que le tomen fotos.

HERMANA LO APOYA
Su hermana Laura se ocupa de administrar los bienes del artista, tales como el estudio Unísono, que solo se alquila a músicos amigos. Por su parte, Benito y Lisa Cerati, hijos del rockero, suelen expresar buenos comentarios sobre su padre en Twitter. También los fans mantienen viva la esperanza de volver a ver a Gustavo Cerati en los escenarios.