Ahorros presentes y futuros: hablemos claro

Enrique Castillo, Opina.21
En las últimas semanas mucha gente se ha preguntado si vale la pena aportar a una Administradora de Fondos de Pensiones (AFP); si está bien que los aportes sean obligatorios; si su AFP le dará una pensión digna; si cumplirá con darle la pensión a sus deudos cuando ya no estén o si se quedarán con su fondo; y, qué es eso de los 110 años.

Respuestas frecuentes a estas interrogantes son sumamente importantes para quienes aportan a una AFP. Pero no las tienen. Hay que arrancárselas a las AFPs, que debían ser las primeras en ofrecerlas, para bien del sistema. Y por eso la incertidumbre. Y cuando alguien de la SBS habla, lo hace mal. En medio del debate, lo más “inteligente” que pudieron decir es que había que elevar el monto de los aportes.

Lamentablemente, la llamada reforma del sistema previsional se hizo tan mal, que lo que ha traído es más confusión y la idea de que algo no funciona bien en el sistema.

Otro caso es el de los bancos. Se le pide a la población que ahorre en un banco para ganar intereses, para que haga fácilmente sus transacciones, y por seguridad. Sin embargo, hoy en día, las cuentas de ahorros ofrecen casi cero en intereses; al ahorrista se le castiga y se le cobra si mueve su dinero en más de dos retiros al mes; se le cobra una comisión por hacer depósitos y retiros en el mismo banco, aunque de una ciudad a otra; y se le cobra altas sumas hasta por enviarle su estado de cuenta.

Y por si fuera poco, los bancos ya no ofrecen la seguridad necesaria en el manejo de la información, como era antes. Ahora es muy fácil obtener toda la información sobre un cliente.

Los ahorros, para el presente y para el futuro son sumamente importantes para la población.

El fruto del trabajo de una persona debería ser bien cuidado, bien remunerado y bien tratado por las instituciones que lo tienen, lo trabajan y lo aprovechan.

La información es fundamental. ¿Por qué esperan a que la población se inquiete y se impaciente?