Es común oír cosas como “estoy reteniendo líquidos”, como si fuera algo tan sencillo como resfriarse o tener hipo. La verdad es que retener líquidos es, en realidad, un síntoma de que algo no anda bien en el organismo.
“La retención de líquidos es un signo clínico, pero no una enfermedad en sí. Es la acumulación de líquidos en zonas en las que no deberían estar”, afirma José Siles, urólogo de la Clínica Internacional.
Siles menciona tres causas principales: aumento de la presión hidrostática (exceso de agua y sodio), reducción de la presión oncótica de los vasos sanguíneos (alteración en el nivel de proteínas) y obstrucción del sistema linfático. ¿Qué significa todo esto?
Pues, que una persona que retiene líquidos podría tener hipertensión arterial, várices, cirrosis hepática, problemas en los riñones, insuficiencia cardiaca, traumatismos, cáncer o alguna otra patología. Es un síntoma que debería preocupar.
¿CÓMO SABER SI UNO ESTÁ RETENIENDO LÍQUIDOS?
Por ejemplo, si usted sube de peso sin causa aparente, si ya no puede ponerse el anillo en un dedo porque está más hinchado o si las medias le dejan marcas en la piel, quizás podría estar reteniendo líquidos. Una visita al médico no estaría de más.
DATO
La diabetes daña los riñones. Esto, a su vez, puede ocasionar una retención de líquidos.
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