Desde cualquier lado
Permite ahorrar tiempo y dinero. Beneficia, sobre todo, a dos tipos de personas: quienes no disponen de mucho tiempo para movilizarse y, por otro lado, las que no viven en la ciudad donde se ofrece el programa virtual.
Flexibilidad
Poder estudiar a cualquier hora es una gran ventaja para quienes necesitan manejar sus propios horarios. Lo inflexible: las fechas y horas que impone el programa para entrega de trabajos, discusiones en foros, evaluaciones, etc.
Socialización
En la modalidad presencial, no es raro que un alumno termine el ciclo y no haya conversado con su profesor. En cambio, los programas en línea fomentan la interacción, ya sea por correo electrónico, videoconferencias, etc.
Sin pizarra
En las aulas, no tomar notas o no haber entendido lo que dijo el profesor es motivo de futuras complicaciones. En la modalidad virtual, la disponibilidad del material es 24/7: videos, documentos, todo lo que necesite está en la red.
Autodisciplina
Es el principal desafío para el estudiante. Es el talón de Aquiles para muchos.
Entorno
Explique a sus seres queridos y compañeros de trabajo que un programa académico virtual es tan exigente como uno presencial.
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