1. NO COMER CON ESTRÉS
“Cuando estás estresado, tu cuerpo entra en un estado de emergencia. Tu metabolismo se altera”, explica Fernanda De La Puente, nutricionista holística. En este modo, la digestión no se realiza de manera apropiada. Consejo: respirar profundamente antes y durante la comida.
2. ALIMENTOS ORGÁNICOS
La especialista sugiere consumir este tipo de alimentos, a fin de evitar el contacto con químicos nocivos para el cuerpo, tales como pesticidas o preservantes. “La comida es un vehículo de transformación para las personas. Mientras más simple, sana y natural, mejor”, anota.
3. NO OBSESIONARSE CON LAS CALORÍAS
“Es muy dañino: crea un trastorno. Hace daño a nivel psicológico y, luego, a nivel físico. Es mejor conectarse con tu propio sentido de saciedad”, precisa De La Puente. Así se evita estresarse innecesariamente.
4. CUIDADO CON LOS PRODUCTOS ESTIMULANTES
El café y el azúcar tienden a alterar rápidamente el organismo. Las personas pueden sentirse, de pronto, muy enérgicas, pero el efecto es solo temporal. El truco está en moderarse a la hora de consumir estos productos. Evite la dependencia.
5. BUSCAR MOMENTOS DE CALMA
Separe cinco o diez minutos al día para desconectarse de todo. Bajar la intensidad de las revoluciones. “En la mañana, antes de empezar el día, es un buen momento para estar solo y libre de pensamientos”, aconseja De La Puente.
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