23.NOV Sábado, 2024
Lima
Última actualización 08:39 pm
Clasificados

Áncash: En EEUU comparan situación en región con el sicariato en México

Es una “mini dictadura” por la ola de violencia y asesinatos que se han desatado, según artículo del New York Times y Wahintong Post.

Ancash llama la atención de la prensa en Estados Unidos. (USI)
Ancash llama la atención de la prensa en Estados Unidos. (USI)

Áncash vive bajo la regla de hierro del presidente regional César Álvarez, que solo se puede comparar con la leyenda de Al Capone, asegura un articulo de The Associated Press, que también publicó el New York Times y Washintong Post.

La situación de violencia en la región peruana traspasó las fronteras. “Es una mini-dictadura”, dijo Christian Salas, el procurador que visitó la región para revisar los casos y las denuncias que existen. Él pidió encarcelar al presidente regional mientras se investigan más de 100 casos de corrupción.

Un juez del Santa prohibió a Álvarez, su principal asesor de prensa y cuatro periodistas, salir del país durante cuatro meses, mientras duren las investigaciones por asociación ilícita y malversación de fondos.

[César Álvarez no podrá salir del país por orden del Poder Judicial]

“LA BESTIA”
En el análisis se considera que los feudos personales de corrupción no son poco comunes en las democracias de América Latina. “No sé de ningún caso donde ha habido tanta violencia, salvo tal vez en el sur de México”, asegura Steven Levitsky, de la Universidad de Harvard.

Las denuncias apuntan a que Álvarez, poco después de ganar las elecciones en 2006, silenció a la mayoría de sus rivales políticos y supuestamente compró la lealtad de algunos medios de comunicación local.

El exconsejero regional Ezequiel Nolasco denunció en reiteradas oportunidades la corrupción que había en Áncash hasta que fue asesinado en marzo último por unos sicarios. Ya había sobrevivido a un atentado en 2010, donde falleció su hijastro de 24 años.

[Huacho: Sicario mata de cinco balazos a exconsejero regional de Áncash]

Según el artículo publicado en los citado medios estadounidenses, Nolasco había advertido en repetidas vece que Áncash es dirigida por un gupo criminal que saqueó el tesoro, mató a la gente que no podía comprar o intimidar, espió a sus opositores y a periodistas como asesinos de caracteres.

Un hombre armado terminó el trabajo el 14 de marzo, al descargar cinco balas en el exdirigente sindical de Construcción, cuando se detuvo en una bodega en Huacho.

Por cierto, Álvarez negó cualquier responsabilidad por el asesinato de Nolasco o cualquier otro delito en una entrevista que otorgó la semana pasada a The Associated Press, después de anunciar que no se presentaría a un tercer mandato en las elecciones de octubre en Áncash.

“La gente me mira como si yo fuera un asesino. Pero, ¿quién es el perdedor aquí? El único perdedor con la muerte del señor Nolasco soy yo. Lo he perdido todo”, dijo el cuestionado presidente regional.

‘LA CENTRALITA
Por su parte, el procurador Salas está centrando su investigación en el antiguo puesto de comando denominado ‘La Centralita’, desde donde Álvarez supuestamente dirigía un Estado clandestino en la sombra, con cerca de US$1 millón al mes en sobornos repartidos.

[Áncash: Procuraduría evalúa denunciar a fiscales por caso ‘Centralita’]

Cuatro fiscales que investigaron ‘La Centralita’ en 2012 fueron destituidos, en un caso que alcanza al magistrado Carlos Ramos Heredia,, fiscal electo de la Nación y primo de la primera dama Nadine Heredia.

El actual titular del Ministerio Público, José Peláez, archivó una investigación sobre las finanzas del gobernador Álvarez el año pasado, diciendo que este no era dueño de una sola pieza de la propiedad. “Siempre he vivido austeramente”, agregó el funcionario al sostener que ni siquiera es el dueño de su casa.

Desde el 2013, el congresista Modesto Julca clamaba declarar en emergencia la región Ancash. El parlamentario contó casi una docena de asesinatos políticos –incluyendo el de un alcalde, un exalcalde, un fiscal, un periodista y el del testigo clave en el caso Nolasco–.

“Le dije a todos y a cada ministro, que se estaba amenazando de muerte y asesinando a la gente en Ancash. Pero nadie me hizo caso”, recordó Julca.

Un niño de 9 años de edad entregó a la fiscal anticorrupción local, Nancy Moreno, un sobre con una bala dentro. “Ya basta”, decía la nota adjunta lectura. “Nadie me toca”, se leía.


Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.