Carlos Carlín,Opina.21
Hace 15 años la serie Pataclaun tiraba al suelo esta afirmación con un producto cuidado que funcionó y todavía funciona en todos los públicos. Hoy La Voz, otra producción de Frecuencia Latina junto con Rayo en la Botella, vuelve a dinamitar ese concepto mediocre y facilón de hacer televisión. Este programa confirma que hacer las cosas como se deben hacer paga y paga bien. Una franquicia que se respeta y no se piratea, que se produce igual que en otros países, con una inversión importante en iluminación y escenografía, un elenco de primera y todos los detalles milimétricamente cuidados, generan un programa exitoso que el público de todos los sectores agradece. La Voz no tiene que recurrir a la bronca, el conflicto o el chisme para ganar audiencia. Promociona muy buenos cantantes nacionales que necesitaban una tribuna para ser conocidos y, además, ofrece, noche a noche, un show de talento dirigido a la familia completa. La Voz es una apuesta ganadora que deja la valla lo suficientemente alta como para que en el futuro no nos presenten adefesios creyendo que no nos daremos cuenta. Buena voz La Voz.
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