22.NOV Viernes, 2024
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Opinión

Me es raro coincidir con el juez San Martín, aunque sea parcialmente.
Como él, creo que está muy mal que un funcionario público grabe a su jefe inmediato durante una confidencial conversación de temas profesionales. Pero hasta allí nomás las coincidencias: yo siempre he sostenido esta posición desde otros casos, mientras que me parece que esto para San Martín no estaría mal cuando se trate de grabaciones a fujimoristas, apristas o derechistas… Y me sorprende mucho que un juez supremo como San Martín salga gratuitamente a evaluar –y así adelantar opinión– este caso, más aún cuando el nuevo procurador Joel Segura ha sido su secretario y jefe de práctica. ¡No quisiéramos pensar que lo ha hecho para ayudar a Ollanta Humala/Nadine Heredia, a un ministro caviar y a un procurador –también caviar– que es bastante cercano a él!

-¡Repelente observar a una ex terrorista marxista como la presidenta Dilma Rousseff ponerse a llorar histriónicamente durante la presentación de un informe tipo CVR allá! Repugnante no solo porque su juvenil opción violentista alimentó esa represión, sino también porque presenta justo ahora ese informe, que huele a cortina de humo, cuando está comprometida hasta la coronilla en la gigantesca corrupción de Petrobras. ¡Ver a tremenda pieza jugando a la buenita estremece mis tripas por tanta hipocresía! Y Petrobras se complica: ayer esta firma fue enjuiciada en Nueva York por accionistas yanquis, que exigen ser compensados por el lucro cesante que han tenido al caer las acciones en Wall Street por corrupción.

-Aduviri solo ganó en la zona aimara de Puno y perdió en las zonas quechuas y mestizas. ¡Felizmente no se impuso el voto tribal!


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