"Ricachones de provincia quieren ser autoridad"

¿Qué tan cerca está el Perú de convertirse en un narcoestado? La congresista Rosa Mavila, presidenta de la comisión de narcopolítica, hace un análisis y nos explica cuáles son los nexos del narcotráfico con la política peruana, a qué se deben y cómo golpean al país.

¿Existe el riesgo de que el Perú se vuelva un narcoestado?
No podríamos decir que estamos en ese escenario pero sí hay indicios significativos de un desbalance patrimonial en algunas autoridades políticas reconocidas. No olvidemos que en la comisión de narcopolítica fueron investigadas 29 autoridades por desbalance patrimonial, inversiones privadas ligadas a presuntos negocios ilícitos, lavado de activos, entre otras actividades.

¿Cuál es el panorama?
Los narcos quieren trabajar tranquilos sin hacer mucha bulla y quieren entrar a un escenario donde sean autoridades políticas o representantes de estos. Esto les permite negociar con el poder político como con un policía o con funcionarios del Poder Judicial. Es decir, hablar de ‘autoridad’ a autoridad. Hay una serie de beneficios que han tenido los narcos o lavadores de dinero como concesiones mineras, predios rurales que les han sido otorgados a través de vínculos políticos.

¿Puede ser más explícita?
Hay personas que de dedican a financiar las campañas electorales en los medios local, regional y presidencial para que los candidatos lleguen al poder y en un mediano plazo se les permita lavar dinero. También se direccionan los procesos de licitación y se lava el dinero procedente del narcotráfico. Además hay nexos con narcotraficantes de otros países como México, Colombia y Brasil.

¿El perfil del candidato presidencial ha cambiado en los últimos años?
Muchos de los actuales candidatos ya son una suerte de “yo ya tengo poder económico, poder empresarial y gran poder en el ámbito regional”, pero eso no es suficiente. La cereza que debe adornar la torta es tener representación política. Por eso tenemos autoridades con mucha plata y poco desarrollo político. ¿Por qué las élites políticas han sido subordinadas por caudillos emergentes con plata? Además esto es un implícito riesgo de la narcopolitica.

Hay una crisis política…
Los partidos nacionales están en una franca decadencia y hay, evidentemente, una gran debilidad institucional de las estructuras políticas partidarias. Ya no hay una trayectoria política en el que el aspirante se va formando sobre la base de ideologías. Acá los ricachones de provincia quieren convertirse en autoridad.

Eso podría ser un comentario discriminador…
No tengo nada contra los ricos de provincia pero, a mi juicio, esto no se condice con un proyecto político paralelo, salvo excepciones. Cuando usted investiga bien de dónde provienen esos patrimonios, generalmente son investigados por lavado de activos. Varios candidatos financian sus campañas con montos millonarios y cuando uno les pregunta de dónde proviene el patrimonio, dicen que de sus propios negocios.

¿Personajes emergentes?
Tengo una trayectoria política de casi tres décadas y le diré que la mayoría de políticos no son grandes empresarios. Mayormente son profesionales de clase media con servicio a la comunidad e interés social.

Si aparentemente tienen éxito profesional y económico, ¿por qué buscan el poder?
Hay varias interpretaciones. El estudioso Jorge Nieto dice que un primer objetivo puede ser que quieran “la paz narca”. Es decir, seguir produciendo, transportando, procesando, llegar a los puertos y a las pistas clandestinas en paz. Para eso hay que tener poder porque, si no, son el blanco de hostigamiento de autoridades. Está el afán de mantener lo que se tiene y seguirlo desarrollando. El narcotráfico es el negocio más rentable del mundo.

¿No hay filtros para evitar que el dinero del narcotráfico se introduzca en la política?
La ausencia de control en los mismos partidos facilita que pueda penetrar dinero del narcotráfico o del lavado de activos. Ese apoyo se convierte en una precondición posterior para garantizarles inmunidad en su actividad ilícita o para garantizarles penetración de sus capitales en actividades del Estado, como en obras.

Candidatos al sillón presidencial que encabezan las encuestas son investigados por lavado de activos.
Es un peligro para el país. Se deberá aplicar lo que se ha aprobado en el Congreso: la famosa ventanilla única. Si el partido decide correr el riesgo de presentar un candidato procesado por lavado de activos y luego sale un fallo condenatorio, ese candidato deberá perder el cargo.

¿Cuán favorables son las propuestas anticorrupción de los candidatos?
Hablemos en serio de política anticorrupción. No nos tiremos un rollito. Se está hablando solo de clichés de programas anticorrupción y no hay propuestas objetivadas en políticas especificas.

¿Qué opina de las campañas electorales millonarias?
Campañas como las de César Acuña y José Luna deben tener un límite de parte del sistema electoral para garantizar una competencia leal entre candidatos. Hay que poner un tope de gastos porque si no, gana la plata y no la propuesta del país.

AUTOFICHA

■ Nací en Ayacucho. Soy abogada de profesión y congresista. Presidí la comisión de narcopolítica. Postularé a la primera vicepresidencia con el Partido Humanista, liderado por Yehude Simon. Soy la número uno al Congreso. Mi objetivo es luchar contra la corrupción.

■ Si llegáramos al Ejecutivo, ordenaríamos toda una sistematización e investigación de todos los casos sentenciados y en procedimiento de droga y lavado de activos para procesar información. Con ello se podría realizar una mejor política.

■ Aún no está nada definido. A los sectores más conservadores les interesa decir que el escenario electoral son solo cinco candidatos. Ellos representan el mismo modelo económico neoliberal. Hay que abrir el escenario para un debate público. La Contraloría debe invitar a todos.

(fvalle@peru21.com)