Al menos 22 personas murieron cuando el ferry dónde viajaban por el río Nilo, cerca de El Cairo (capital de Egipto), naufragó al chocar contra otra embarcación. Cinco personas resultaron heridas y nueve salieron ilesas del agua.
Se trataba de una embarcación de recreo y había unos 40 pasajeros a bordo, entre ellos, mujeres y niños. En un primer instante, los familiares que consiguieron escapar intentaron saltar al agua y rescatar a sus parientes. Al llegar los equipos de salvamiento pusieron en marcha el operativo para rescatar el resto de cadáveres.
Según las primeras investigaciones, el ferry realizaba un paseo por el Nilo cuando colisionó contra un barco de carga de mayor eslora, denominado ‘sandal’ en árabe, y se hundió debido a los graves daños provocados. Las autoridades detuvieron al capitán y a tres de sus ayudantes de esta segunda embarcación, se les acusa de homicidio involuntario de infringir las reglas de transporte marítimo.
NAUFRAGIOS COMUNES
Los hundimientos de embarcaciones son bastante habituales ya que muchas barcas están en un estado precario y suelen ir sobrecargadas de pasajeros. Además, muchos egipcios no saben nadar.
Los viajes en barco son comunes en estas fechas para celebrar el fin del mes sagrado del Ramadán.
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