La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, quien se encuentra en Santiago de Chile en la Cumbre Celac-UE, anticipará su regreso tras conocer la tragedia ocurrida por el incendio en una discoteca en el sur del país, con al menos 232 muertos y decenas de heridos.
Según informó la agencia oficial de noticias ABR, la mandataria brasileña canceló las tres reuniones bilaterales que tenía previsto mantener hoy con autoridades de Argentina, Letonia y Bolivia, para viajar directo hacia Santa María, ciudad localizada a 270 kilómetros de la capital provincial de Porto Alegre.
Rousseff se comunicó por teléfono con el gobernador Tarso Genro, a quien le ofreció todo el apoyo necesario para afrentar la tragedia, cuyo número total de víctimas podría aumentar.
También viajarán a Santa María el ministro de Salud, Alexandre Pacilha; la ministra de Derechos Humanos, Maria do Rosário, y el gobernador Genro.
Las llamas comenzaron en la madrugada de hoy, al parecer a raíz de una especie de show de pirotecnia que realizaba el vocalista de un grupo musical que se presentaba en el escenario del local nocturno. La discoteca tiene capacidad para unas 2.000 personas y estaba llena.
Los bomberos continúan en el lugar la búsqueda de víctimas entre los escombros.
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