Según investigaciones de las cadenas locales NDR y WDR, las armas proporcionadas por los fondos de las Fuerzas Armadas de Alemania (Bundeswehr) para la formación de los peshmerga kurdos, terminan en manos de los terroristas de Daesh a través del mercado negro.
En una reciente entrevista a Sputnik, Jürgen Grässlin, portavoz de la acción “Alarido – detengan el comercio de armas”, acusó al gobierno alemán de provocar indirectamente la muerte de inocentes en el norte de Irak.
“El Gobierno de Alemania, como regla, no tiene ni idea donde efectivamente se suministran sus armas. Mis investigaciones basadas en los materiales de muchos países y viajes realizados durante los últimos 30 años a las regiones en crisis y las zonas de operaciones han revelado que las armas se trasladan. No se quedan en el lugar al que se exportan”, explicó el experto.
Por su parte, las Bundeswehr niegan su responsabilidad y aseguran que el gobierno de la región autónoma de Irak ha garantizado el monitoreo y uso correcto de las armas.
Hasta el momento, las Bundeswehrn han suministrado 2.400 toneladas de armas y municiones, hecho que viola el embargo de la ONU a las exportaciones de armas en zonas de conflicto.
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