Las aguas parecen volver a su cauce. En medio de alarmantes indicadores de un freno en el ritmo de crecimiento económico y del vendaval de críticas de diversos sectores políticos y empresariales, el Gobierno decidió ayer dar marcha atrás en sus pretensiones de comprar los activos de Repsol y anunció más bien, que priorizará la ejecución de proyectos en curso, entre ellos la modernización de la refinería La Pampilla.
A través de un comunicado, Petroperú anunció que luego de una “evaluación técnica, económica y financiera” se acordó no continuar con el proceso de adquisición. La versión fue confirmada después por el ministro de Energía y Minas, Jorge Merino, quien negó que la medida responda a una estrategia política del Gobierno o a presiones mediáticas. También desmintió que el caso Repsol haya originado discusiones en el gabinete. “Aquí hay una decisión técnica, económica y financiera muy detallada de todo el portafolio de negocios que tiene Petroperú”, arguyó, sin desmentir ni confirmar si el Estado peruano presentó una oferta económica de US$300 millones o US$400 millones por el negocio.
El premier Juan Jiménez, en tanto, argumentó que no se avanzó en el proceso “porque no es un asunto que le genere posibilidades económicas al país”. Asimismo, lamentó la intolerancia de algunos sectores respecto de la operación.
Conocida la contramarcha gubernamental, la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, saludó la medida, pero advirtió que lo ocurrido evidencia “que no había un estudio del tema” o que el mandatario “necesita presión política para decidir”.
“Presidente Humala, una vez más queda demostrado que la ambigüedad en sus declaraciones genera inestabilidad, incertidumbre y retroceso. Vaya con cuidado. Para que no huela a gran transformación, debe haber gran transparencia”, concluyó.
La legisladora Lourdes Alcorta, por su parte, manifestó que “el presidente tiene la obligación de generar estabilidad política, jurídica, institucional, y no generar zozobra”. En esa línea le recomendó convocar a asesores que conozcan el tema “y no sobones a sueldo con sentimientos nacionalistas trasnochados”.
RENUNCIA
El vocero fujimorista Alejandro Aguinaga descartó el retiro de la moción de interpelación al titular de Energía. Por el contrario, dijo que lo ocurrido con Repsol “lo ha descolocado, por lo que lo más saludable sería que renuncie”. Su propuesta fue respaldada por Juan Sheput. “Merino no debería seguir en el cargo”, subrayó.
DATOS
- El titular de Energía y Minas señaló que Petroperú se abocará a la modernización integral de la refinería de Talara con el fin de ampliar la producción de 65 mil hasta los 160 mil barriles diarios.
- Explicó que dentro de dos semanas estará listo un informe especializado referido a los montos de inversión que requiere la modernización de la planta. La elaboración del documento, dijo, está a cargo de una tercera consultora.*
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