Manuel Sosa,Opina.21
Arellano Marketing
Un regalo puede ser embajador de nuestra empresa, y lo ideal es que permita fortalecer relaciones. El regalo es importante, pero también lo es el cómo obsequiar. Hay que tener cuidado al escoger los presentes y la actitud que lo acompaña. No pequemos por déficit o por exceso.
A nivel de nuestros clientes y proveedores, un regalo demasiado grande puede interpretarse como “comprometedor”, y si es muy pequeño, puede percibirse que fue por “obligación”.
Con los empleados, de igual modo, el regalo es un agradecimiento. Evitemos que sea poco valorado o que sea muy pomposo y genere suspicacias sobre la repercusión en los salarios o utilidades.
Tengamos sutileza de escoger algo que sea lo suficientemente significativo e interesante, sin caer en la suntuosidad. Escoger un regalo de Navidad es complicado. Con nuestras amistades podemos dejar esta elección al azar, pero como empresas no, porque todo comunica.
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