Tras el asesinato del ciudadano afroamericano Philando Castile (32) a manos de un policía del estado de Minnesota en Estados Unidos —hecho que quedó registrado en un video difundido por su pareja mediante el Facebook Live— la cantante Beyoncé no se contuvo y alzó su voz de protesta exigiéndole al Gobierno de Estados Unidos que “paren de matarnos”.
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“Estamos enfermos y cansados de los asesinatos de hombres y mujeres jóvenes de nuestras comunidades. Nos corresponde a nosotros tomar una postura y exigir que dejen de matarnos”, dijo Beyoncé a través de un comunicado titulado como “Libertad” y difundido en su página web .
La cantante también hizo hincapié en que estos hechos violentos por parte de los oficiales —aquellas personas que juraron protegerlos— no deben quedar impune. Por ello, exhortó a las comunidades a “ponerse de pie” y actuar de forma legal y organizada para exigir a las autoridades un cambio social.
“Todos nosotros tenemos el poder de canalizar nuestro enojo y frustración en acciones. Debemos usar nuestras voces para contactar a los políticos y legisladores de nuestros distritos para demandar cambios sociales y judiciales”, continúa Beyoncé.
Asimismo, la cantante de ascendencia afroamericana manifestó que “el miedo no es una excusa” porque “el odio no va a ganar”.
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“Estos robos de vidas nos hacen sentirnos impotentes y sin esperanzas, pero tenemos que creer que estamos luchando por los derechos de la próxima generación, para los próximos hombres y mujeres jóvenes que creen en el bien”, se lee en su comunicado de la artista.
La noche del jueves durante su concierto en la ciudad de Glasgow en Escocia, Beyoncé le pidió a su público un minuto de silencio para las víctimas de la violencia policial. Además, en un gran proyector exhibió los nombres de los fallecidos y cantó a capela su emblemático tema Freedom (Libertad).
Este suceso en Minnesota, tuvo lugar el mismo día en que el Gobierno de Estados Unidos anunció que investigará la muerte de Alton Sterling —otro hombre afroamericano de 37 años— quien falleció el pasado martes en la localidad de Luisiana, después de un altercado con dos policías. El hecho también quedó registrado en video y desató la indignación de los ciudadanos.
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