Carlos Viguria
@cviguria
El anime ha aportado al mundo una infinidad de producciones populares y Perú no ha sido la excepción. Meteoro, Capitán Futuro, Sailor Moon y Dragon Ball forman parte indudable de la infancia de muchos. Pero existe más por ver en Japón, y sobre ello conversamos con la experta española en anime y cine japonés Laura Montero.
Hace años había series exitosas y populares, pero siento que hoy no pasa lo mismo…
Ha cambiado un poco el panorama. Yo crecí en España en los ochenta y noventa, y la TV era puro anime. Y ahora no se ve tanto. Se debe a varios factores. Por ejemplo, en España hubo polémica con Dragon Ball Z porque decían que era violento y no era para la familia. Eso causó una lucha mediática que llevó a que la serie se cancelara. En España dices ‘anime’ y lo asocian con violencia y sexo.
Ese es un estigma muy grande, porque afecta a otras producciones que sí son dirigidas a un público infantil.
Porque, además, asocian el anime con violencia y la animación solo con Disney. Por otro lado, existe una crisis temática. Sí veo que existe un declive en los animes. Había una época dorada a principios del 2000, con series maravillosas, pero ahora sí me resulta más complicado encontrar alguna.
Uno de los principales exponentes del anime es Hayao Miyazaki. ¿Por qué se ha vuelto relevante?
Debido a que en sus filmes, los protagonistas femeninos son empoderados (no son las típicas damiselas en apuros) y por la complejidad de los personajes: estos actúan según una circunstancia o una filosofía de vida con la que puedes no estar de acuerdo pero puedes entenderlos. Y Miyazaki logra que sean comprensibles para todas las edades.
Y pasando al cine japonés, ¿cuál es el panorama actual?
Es muy rico. El cine japonés ha tenido representantes clásicos como Mikio Naruse o Akira Kurosawa, y ahora existe un abanico inmenso de directores.
¿A quiénes destacaría?
Hirokazu Koreeda y Naomi Kawase son los directores más interesantes por representar la vertiente más intimista del cine japonés. Ambos se formaron como documentalistas, pero luego dieron el salto a la ficción. Kawase se caracteriza por representar su experiencia propia para luego vincularla con la naturaleza y ritos ancestrales. Y Koreeda está más interesado por la crítica social, partiendo de una historia individual.
Un director que destacamos es Takashi Miike. ¿Qué nos puede decir de él?
Es el más polifacético. Puede hacer filmes serios, como 13 asesinos o Hara Kiri, y también para niños. Tiene una película, Sukiyaki Western Django, en el que el director estadounidense Quentin Tarantino interpreta un pequeño papel. Un filme interesante suyo es también A Big Bang Love, que narra una relación de amor homosexual en una cárcel.
La sociedad japonesa es conocida por ser conservadora. ¿Recibe bien este tipo de temáticas?
Tiene contradicciones en lo que practica día a día y lo que consume. En el anime, existe todo un género romántico homosexual que es para público femenino. Esto muestra la gran fortaleza de su cine y anime: pueden tocar todo tipo de tema y condición.
Dato
Montero indica que uno de los últimos buenos animes es ‘Fullmetal Alchemist: Brotherhood’ por tener una calidad de animación impresionante.
Filmes recomendados
La especialista en anime y cine japonés nos recomendó las siguientes producciones:
- Caminando de Hirokazu Koreeda
- Aguas tranquilas de Naomi Kawase
- Dolls de Takeshi Kitano
- El viaje de Chihiro de Hayao Miyazaki
- Summer Wars de Mamoru Hosoda
- 5 centímetros por segundo de Makoto Shinkai
- Short Peace de Katsuhiro Otomo
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