La protagonista de La teta asustada, Magaly Solier, sufrió esta semana un reprochable incidente en uno de los buses del Metropolitano: un sujeto se masturbó detrás de ella y nadie salió en su defensa, por lo que la actriz debió perseguir a su acusador e increparle el hecho hasta golpearlo.
Este incidente, lamentablemente, es solo uno de tantos casos de mujeres que están a la merced de depravados que filman o tocan a agraciadas jovencitas y hasta se atreven a difundir por Internet su ‘hazaña’ en este medio de transporte.
Pero todos los pasajeros y empleados del Metropolitano están expuestos a ser víctimas de ladrones o hasta de sujetos perturbados que desatan una gresca al menor altercado.
Este servicio, junto con el Metro de Lima, se presentan como una solución al problema del transporte público en la capital, de allí que la demanda sea tan alta y por ello se requieren mayores reformas, como mejorar la capacidad de los buses y la seguridad que se debe brindar a hombres y mujeres.
Magaly Solier ya denunció la agresión que sufrió en la estación Aramburú en la comisaría de Surquillo y Protransporte espera que video ayude a identificar al sujeto que la atacó.
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