Más de 6,000 vehículos que prestaban servicio de taxi de manera informal en la capital fueron sancionados en los últimos tres meses por la Municipalidad de Lima, informó hoy la titular de la Gerencia de Transporte Urbano (GTU) de dicha comuna, María Jara.
La funcionaria precisó que la fiscalización de estas unidades se inició el 11 de noviembre de 2012 tras vencerse el plazo para el empadronamiento de los taxistas.
En declaraciones a la agencia Andina, Jara reveló que el municipio acaba de terminar con el proceso de contratación de 600 fiscalizadores, con los cuales la comuna limeña suma un total de 1,000 agentes que operan en distintos puntos de la capital.
“Quisiera que se comprenda la importancia de intervenir, principalmente, a los colectivos. Dicho servicio es ilegal y no es posible que ningún municipio distrital lo reglamente o acoja en su jurisdicción”, aseveró.
Indicó que el empadronamiento de taxis, que concluyó el pasado 10 de noviembre, servirá para determinar una serie de políticas municipales dirigidas a establecer las rutas exactas de este servicio, así como beneficios para los conductores.
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