La Empresa Municipal de Mercados (Emmsa) anunció hoy que se tiene previsto extender de 6 a 12 años el contrato de arrendamiento a los comerciantes del Gran Mercado Mayorista de Lima, a fin de que tengan una mayor seguridad jurídica.
“El directorio de Emmsa está discutiendo este tema y prácticamente existe el acuerdo por extender de 6 a 12 años la permanencia (de los comerciantes) en el mercado. Esto les permitirá tener mayor seguridad jurídica de permanencia y de manejo en los puestos de venta”, explicó Rafael Gómez, gerente de la empresa de la Municipalidad de Lima.
Esta mañana un grupo de comerciantes centro de abastos ubicado en Santa Anita realizó un plantón para exigir que cese un supuesto hostigamiento de parte de Emmsa para obligarlos a pagar alquileres.
Al respecto, Gómez señaló que no se bajará el precio del alquiler de los puestos que ahora oscila en 1,500 soles por cuanto en el 2013 se les dio un periodo de gracia, es decir, que no pagaron nada para que puedan adecuar sus negocios.
Sin embargo, a partir de enero del 2014 debían empezar a pagar sus alquileres por un monto de 2,200 soles mensuales, pero este año se acordó rebajar esa suma a 1,500 soles hasta diciembre.
“No podemos aceptar que comerciantes que tienen ingresos suficientes no puedan pagar un arrendamiento de 1,500 soles. Este es un mercado que produce alrededor de siete millones de soles al día, es decir, que son más de mil millones de soles al año”, dijo.
El funcionario recalcó que el diálogo con los comerciantes “no se ha roto”. “Lo que sí hay es bastante intransigencia de un pequeño grupo de comerciantes. Con el giro de la papa, que es el grupo mayoritario en el mercado, hemos pactado ayer un acuerdo, por ello no se han plegado al plantón”, afirmó
“Pagar 1,500 soles mensuales significa 50 soles al día, es inaudito que un comerciante mayorista que mueve 10,000 soles como movimiento diario no pueda pagar 50 soles al día”, apuntó.
RESPUESTA
Pedro Arellano, presidente de la Asociación de Empresarios y Comerciantes de Santa Anita, indicó que 1,500 soles es un precio excesivo en comparación a las ganancias que obtienen por la venta de sus productos.
Agregó que sus asociados aún siguen registrando pérdidas por la presencia de comerciantes procedentes de La Parada y de Unicachi, quienes, según dijo Arellano, generan una competencia desleal.
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