Debido a su tamaño, las motocicletas pueden ser más fáciles de robar que un auto. De no tomar algunas precauciones, situaciones como detenerse o estacionar la unidad en la calle pueden convertirse en una invitación al robo. Así, una de las primeras que nunca se debe olvidar cada vez que deja su unidad es bloquear la dirección y llevar la llave: de esta forma evitará que hurten el vehículo empujándolo. Además, es fundamental nunca distraerse y estar atento a lo que lo rodea.
Accesorios antirrobos
Al igual que los automóviles, podemos utilizar ciertos accesorios para evitar que roben nuestra unidad. Algo que no debe faltar nunca es una cadena y un candado, que sirven para asegurar la unidad a un punto fijo como un poste.
Entre los cables más difíciles de cortar están los articulados con casquillos de metal, que se pueden enganchar, para más seguridad, a una horquilla antirrobo en ‘U’, que se recomienda colocar en el neumático delantero, aunque puede ser instalado también en el posterior. Todos estos son accesorios ligeros y fáciles de llevar a cualquier lugar.
Sistemas avanzados
Los que deseen contar con el amparo de la tecnología para proteger su unidad, pueden instalar un sistema de alarma o adquirir modernos accesorios como horquillas y cadenas que incorporan una alarma y se encienden cada vez que son manipuladas. Otra opción es contar con un equipo de GPS. Este puede ser adquirido en cualquier tienda especializada o, en todo caso, instalado por alguna de las empresas que ya brindan servicios de localización en nuestro país.
Tenga en cuenta
- Además de asegurar su moto con algún sistema, siempre es preferible tenerla guardada en una cochera propia o donde no la pierda de vista.
- Todavía no es tan sencillo encontrar un seguro contra robos para motocicletas en nuestro país. La mayoría de los existentes se ofrecen solo a flotas empresariales.
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