Más sombras se ciernen sobre el expresidente Alejandro Toledo. Ahora por extrañas reuniones en Costa Rica, el país donde se formó la empresa Ecoteva Consulting, con la que su suegra Eva Fernenbug consiguió un préstamo de US$3 millones para la compra de su mansión en Las Casuarinas.
Según informó el programa costarricense Hoy Investiga, Toledo se reunió en enero de 2012 con el abogado Melvin Rudelman, del bufete donde se formó Ecoteva en marzo de 2012 (solo dos meses después), y también con el vicepresidente de Costa Rica, Luis Liberman.
Lo más extraño de esta reunión es que Liberman fue en su momento gerente general de Scotiabank en su país, el banco que aprobó el millonario préstamo a Ecoteva, pese a que era una empresa recién formada, y presidida por una mujer de 86 años.
El vicepresidente costarricense se defendió asegurando que nunca tuvo ninguna relación comercial ni financiera con Toledo, y que solo se reunión con él durante un encuentro de miembros de la comunidad judía en su país.
Sin embargo, el reconocido bancario que ahora ocupa el segundo cargo más importante tras la presidenta Laura Chinchilla, no ha brindado más declaraciones a la prensa de Costa Rica.
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