Politiquería con los pasajes

Aldo Mariátegui,Ensayos impopulares
Es realmente escandalosa la maniobra villaranesca de intentar aplazar hasta después de las elecciones el cobro de los pasajes de sus buses azules. Así, se prefiere dilapidar indiscriminadamente los escasos ingresos municipales en subsidiar movilidades en lugar de gastarlos en obras, debido a que la izquierda sabe que será su fin político cuando la gente empiece a pagar un precio mucho mayor al acostumbrado. Ya el PPC exigió saber cuál será el costo hasta octubre. Gestión lo estima en cerca de un millón de soles diarios.

¿Y qué tanto se retuerce la izquierda porque Castañeda haya hecho una nutrida marcha ayer hacia el JNE? ¿Acaso la Villarán no forzó su angustiosa inscripción para las elecciones pasadas con varios plantones frente al JNE? ¿Acaso no estarían ya marchando la CGTP, los supuestos “actores” que tenemos y demás yerbas rojas hacia el JNE si hubieran tachado a Villarán igual que a Castañeda? Lo que está haciendo Luis Castañeda es la misma política de protesta callejera que ha practicado la izquierda por años (¡y mucho me alegro que la derecha ya comience a imitarla!).

Lo que pasa es que la izquierda les teme a los movimientos populistas de derecha que le quitan espacio en los sectores C/D/E, y sospecho que por eso odian tanto al castañedismo y al fujimorismo, más que por considerarlos corruptos.

Es que estos sí “tienen cerro” e implantación en provincias, a diferencia del PPC, PPK y otros derechistas. ¡El mismo Wiener confesó esto hace unos días! Ya les gustaría a los caviares y a los rojos estar primeros ahora en los conos. Lo más tragicómico es que A/B son los limeños que apoyan a Susana Villarán.