Pablo Secada: Ahora es cuando

La confianza empresarial retrocedió. Ya reconocimos los límites de gobernar sin instituciones, en Mercalandia, con inocencia tecnocrática o frivolidad política. Bueno, resulta que los que navegan mejor nuestra política están en problemas. Toledo es prófugo. Alan, Nadine y Humala lidian con sus problemas.

Las campañas de Keiko y Lucho recibieron financiamiento. Butters iría con López de Aliaga y Luna solo, así que Lucho se quedó sin financiamiento y sin teflón. Los Fujis relevantes nunca buscaron la vacancia que asustó a algunos. El financiamiento de First Capital a Odebrecht es el último susto pendiente.

Es políticamente menos relevante que lo anterior, Joaquín y Kenji. Muñoz y Velarde también se preparan. Y así hay poco tiempo para adoptar reformas.
Es el momento de pedir facultades para reformas institucionales. Fiscales y jueces autónomos, que ganen lo mismo que en los principales estudios de abogados, con infraestructura para enfrentar la corrupción endémica. Reformas electorales y políticas que podrían partir de la propuesta de Transparencia. Este sería el principal legado de PPK.

Y audacia en lo que se supone que dominan. ¿Por qué no han convocado a concursos públicos internacionales para asesores integrales para el plan nacional de infraestructura y programas de APP? Odebrecht jamás hubiera sido un problema con APP competitivas. Tampoco habría la megacorrupción en la obra pública. ¿Los centros de excelencia en las universidades públicas que (casi) no tienen investigadores y subsidios a empresas, seguirán siendo la política pública de innovación? Uno de los países más biodiversos merece un fondo que garantice el financiamiento para producir medicinas, cosméticos, súper alimentos y otros. ¿Seguiremos permitiendo que alcaldes impidan planes urbanos y de transporte serios?

Ahora es cuando. A ver si se sacuden del día a día, dejan de permitir que los zarandeen, levantan la cabeza y ocupan el espacio político con una agenda de reformas ambiciosa.