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"La modelo peruana es más valorada fuera"

“No me considero vanidosa, pues no creo que lo físico marque la diferencia entre los seres humanos”, nos dice la bella Marina Mora, ex-Miss Perú Mundo y hoy empresaria: es dueña de la firma de cosméticos Bellísima.

Foto: César Fajardo.
Foto: César Fajardo.

Marina Mora,Empresaria
Autor: Gonzalo Pajares.
gpajares@peru21.com

Marina Mora organiza Miss Teen Model Perú, un evento que busca nuevos valores dentro del mundo del modelaje. El casting será el 24 de agosto. Inscripciones: 719-4545 y www.marinamora.com. Sobre belleza y más conversamos con la bella Marina.

¿Por qué son necesarios los concursos de belleza?
(Piensa). Porque es una vitrina para exponer la belleza de la mujer, para promocionar la industria de la moda y los atractivos de los países participantes. Hay que verlos, también, como un tema comercial, de publicidad. Las reinas se terminan convirtiendo en embajadoras de sus países, de sus diseñadores, de sus productos de belleza, porque, por lo menos durante un mes, tienen los ojos de todos puestos sobre ellas.

¿Estos concursos están viendo en la mujer algo más que su belleza?
Siguen siendo de belleza. Las chicas no tienen que ser unas embajadoras de la cultura. Sin embargo, hoy se le da más importancia al desenvolvimiento y a la forma de expresarse, y esto refleja su grado de instrucción, su cultura y su personalidad.

¿Los concursos de belleza se harán obsoletos?
Al contrario. Acabo de estar en un pueblo al que no llega nadie, y una de las maneras de darle valor, protagonismo e independencia a la mujer es a través de los concursos de belleza. Antes, los hombres no dejaban que las mujeres se exhibiesen, y hoy las mujeres se están liberando, al punto que, si bien no desfilaron en ropa de baño, sí lo hicieron en shorts. Yo también pensé que los concursos podían desaparecer pero, por situaciones como esta y la fuerza cada vez más grande que toma la industria de la moda, creo que eso no pasará.

¿A la industria de la moda le falta peruanizarse?
Yo soy adicta a la moda, y cuando veo las webs de las tiendas por departamento de EE.UU., que es el país que más moda mueve, me encuentro con modelos con rasgos bien peruanos como Juanita Burga. A la modelo peruana se le aprecia más afuera que aquí. Ahora, yo que tengo una empresa de productos de belleza, veo que, aunque ya está cambiando, la gente no acepta el color de su piel ni los tonos que más le van.

¿Qué dicen cuando llegan las alumnas de tu academia de modelaje?
Hay de todo. Aquí no solo llegan chicas que quieren ser modelos, sino también algunas que quieren desarrollar su imagen: aprender modales, etiqueta. Nosotros les damos un taller con una psicóloga experta en desarrollo de la personalidad, donde les decimos que deben aceptarse y valorarse como son y, a partir de ello, reconocer sus virtudes y sus defectos, sean físicos o de personalidad: timidez, mal carácter, etcétera.

¿Has recibido chicas víctimas del bullying?
He tenido ‘emos’, chicas que no quieren venir a la escuela, pero cuyas madres las traen y, al final, salen comprendiendo que lo importante no es lo externo, sino cuán bien se sientan.

¿Cuán cruel es la sociedad peruana?
Es muy envidiosa pero, ahora, con la bonanza económica, las cosas han mejorado. Hoy nos sentimos más orgullosos de ser peruanos pues vivimos una época bonita, de éxito; entonces, muchas veces me pregunto: si esto es así, ¿por qué a veces nos comportamos como mediocres?

Cada vez hay más adolescentes que les piden a sus padres un aumento de busto…
Muestra que hay gente que no ha aprendido a quererse, a aceptar su edad, están quemando etapas. Yo no me opongo a las cirugías: si crees que arreglándote la nariz o levantándote el busto te vas a sentir mejor –ojo, sentir mejor, no ver mejor–, adelante, pero hay edades para todo. Y esto pasa porque hay mucha presión, mucho culto a la belleza externa.

¿Te pasó?
Sí, pero no de chibola. La presión fue por mi peso. Hoy estoy feliz, he llegado al peso que nos propusimos. Me operé el año pasado: he bajado 28 kilos, pero queremos que sean 35. Y digo ‘queremos’ porque están comprometidos un nutricionista, un endocrinólogo, mi cirujano, mi familia, etcétera.

¿Cuántas cirugías tienes?
Varias: en la nariz, por allá… Cuando tenga unos años más, definitivamente me las haré. Es más, como gesticulo bastante, he pensado en el Bótox.

Me parece cruel tu negocio…
Es que no es cruel ni me preocupa, yo lo asumo con naturalidad, pues me gusta y lo disfruto… incluso maquillarme.

Preferiría verte despierta por la mañana, al natural…
Cuando quieras nos tomamos un café (risas). Hoy, cuando me miro al espejo, me pregunto ¿cómo puede tener 28 kilos más? Hoy me siento mejor, no por el físico, sino por salud.

¿Cuándo vas a presentar a tu novio?
Si digo que estoy enamorada, se hace un escándalo; si digo que no, igual. Te puedo decir que estoy enamorada, lo que no quiera decir que tenga novio (risas).

AUTOFICHA

- Cuando fui Miss Perú Mundo –hace once años ya– regalaba merchandising de Machu Picchu, lugar que, si bien ya era conocido, no lo era tanto como hoy.

- Bajé 28 kilos de peso porque me dijeron que si subía un kilo más, iba a terminar diabética como mi papá. Hoy quiero bajar siete kilos más.

- Tengo contacto con mis alumnas, con mis clientas, converso con ellas y sé que, así como les hacen bullying a las más feas, también se lo hacen a las más bonitas.


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