Juan José Garrido: Iguales ante la ley

Las corruptelas de la pareja Humala-Heredia, como las de cualquier funcionario público, son asquientas y deben ser investigadas y sancionadas. Sí, igual que las del fujimorato, apristas, belaundistas, toledistas y todos aquellos que ya conocemos. Unos robaron más, otros robaron menos; unos robaron, otros dejaron robar. Da lo mismo un sol que cien millones.

Lamentablemente, parece que las corruptelas son subjetivas al sujeto de estudio: pareciera que no es lo mismo una corruptela aprista que una humalista; no sería lo mismo una corruptela fujimorista que una villaranista; y así. Algunos comentarios sobre tres espacios en este cuento.

Primero, el gobierno. A sabiendas de lo que han encontrado (y lo saben), y a sabiendas de lo que viene, ¿por qué no hacen una auditoría general a todos los proyectos y al gasto público durante el nacionalismo? Agarren todo lo que pase de un monto importante (¿US$50 millones?) y contraten una empresa de auditoría (internacional aún mejor) para que nos diga qué debe ser investigado por la Fiscalía y la Contraloría. ¡Sáquense ese muerto de encima!

Segundo, la coalición humalista. Lo usual es que los corruptos pongan cara de tontos y balbuceen vaguedades; lo lógico es que salga el abogado a realizar una defensa cerrada del “malentendido” (es, al final, un contrato). Pero que una orquesta de (habrá que llamarlos) medios, periodistas, analistas, juristas y demás salgan a cuestionar las pruebas (cuando sobran), los testimonios (documentados), las transferencias y demás, pues da náuseas, qué quieren que les diga. Todo lo que han achacado a apristas y fujimoristas en el pasado, pues se lo han ganado a pulso. Sigan así.

Tercero, la administración de justicia. La justicia debe ser igual para todos, y eso supone igual severidad con unos y otros. Por mucho menos que lo constatado en el caso Humala-Heredia, están en prisión preventiva Martín Belaunde y otros. Además, pocos tienen la capacidad de mover fichas y recursos como la parejita en cuestión. ¡Midan con la misma vara!