Pablo Secada,Regidor por Lima.
Autor: Gonzalo Pajares.
gpajares@peru21.com
Pablo Secada iba ganando espacio en las encuestas para la alcaldía de Lima, pero, de pronto, cuando se hicieron públicas las denuncias de su pareja por agresión, su imagen se opacó. Con esta entrevista vuelve a la palestra pública y afirma que su precandidatura municipal sigue firme.
¿Vas a ser candidato a la alcaldía de Lima?
Hay un proceso formal por seguir. El 21 y 22 de marzo, el PPC tiene su congreso y allí se elegirá el mecanismo de votación para seleccionar a los candidatos. Uno podría ser, que es el que señala el estatuto, el de ‘un militante un voto’; el otro es que se elijan 25 delegados y que a estos se sumen 25 ‘notables’ del partido, quienes juntos escogerían a los candidatos. En el primer escenario, mi candidatura seguiría; en el segundo, sería improbable. Si paso esta valla, en mayo sabría si soy candidato, pero mi precandidatura sigue firme.
¿Por qué no has aparecido últimamente en los medios?
Cuando aparecieron las denuncias en mi contra, Claudia (su pareja), y yo dimos la cara y explicamos lo sucedido, pero eso no sirvió para nada, al contrario, agravó la situación. Cuando salió el segundo grupo de denuncias, decidimos no explicarlas más, no porque no queramos ser transparentes sino porque creemos que lo mejor es ir a las instancias que investigan lo sucedido…
El Tribunal de Ética del PPC, por ejemplo…
Sí, pero también está pendiente que Claudia se presente ante la Fiscalía (por las denuncias que hizo contra Secada), y yo ante el Juzgado por la denuncia que me hizo una policía. Allí presentaremos todas las pruebas que tenemos y, luego, se las alcanzaremos a la prensa.
¿Tu mejor estrategia de defensa no debería ser la verdad?
La verdad fue lo que dijimos… pero la verdad no funcionó. Ahora, así es la política, no estoy sorprendido, no voy a decir que lo que me han hecho es bajo y ruin, solo sé que así funcionan las cosas, entonces, nos corresponde presentar toda la información de la que disponemos, y, que luego la gente tome una decisión… pero informada. Cometí errores, pero esto se enmarca en una campaña donde las otras partes encontraron esta información y la usaron para bajarme porque yo había empezado a subir en las encuestas.
Cometiste varios errores…
Son decisiones que tomé con Claudia y con terceros. Lo ideal hubiera sido contar con un director de medios, pero nuestra campaña es austera. En diciembre, cuando nos enteramos de que se iban a exponer estos problemas quise declarar, por transparencia y para evitar que esto creciese, pero decidimos esperar y, bueno, ya sabemos lo que pasó.
¿Fue un error la foto de portada que te hizo Caretas?
No, esa foto refleja una parte de mi vida en pareja, y en ella no todo el día nos tiramos los platos (risas). Y es más común que a Claudia le ponga la mano en la cintura baja a que vaya a un parque a tomarme una foto. Con ella hemos tenido discusiones fuertes, pero durante los últimos meses nuestra relación ha crecido, es más, hemos pasado por una evaluación psicológica…
¿Has salido bien librado?
Ya lo sabrán (ríe). El ciclo de la violencia supone que ella es sumisa y sojuzgada, y que yo soy por naturaleza violento. Allí leerán, pues, qué dice un psiquiatra de renombre sobre nosotros.
¿Eres irascible?
No, soy de aguantar bastante, pero si se sigue insistiendo en el tema un buen rato, me molesto, pero también se me pasa rápido.
Antes de este episodio, ¿has recibido tratamiento psicológico?
No. He ido con Claudia a una terapia de pareja. Y en el colegio era muy movido, pero mi tutora siempre habló bien de mí… pero a futuro, pues era inquieto (risas).
¿Eres picón?
Míralo en perspectiva. La semana que estuve metido en este lío, por mí hubiera sido mejor que me trepen a un cohete y me manden a Marte. Lo que viví fue una inmolación. Ustedes me conocen hace más de 20 años y me han visto debatir por horas con gente que lo único que hacía era insultarme, y no explotaba.
El problema es que no te denuncia una sola mujer sino tres…
Te pido que esperes, todo se va a saber. Lo que reconozco es que si me jalas la pita durante 40 minutos, al minuto 40 y 1 segundo te mando al carajo, y al minuto 40 y 3 segundos soy de nuevo soy tu amigo. A mí que me digan lo que quieran, pero esta vez se metieron con mis hijos, y a Claudia la han tratado de víctima y de loca… y a esto le dije “basta ya”.
¿No sientes que te falta afinar tu rol de candidato?
Las denuncias existen, no las niego. Tengo un equipo de trabajo, pero tuvimos descoordinaciones y cometimos errores. Con Claudia acepto errores de mi parte, pero no en los casos de la mujer policía y de la colombiana (su anterior pareja). Con Claudia llegamos al punto de levantar la voz y ofender, pero eso de los empujones no existe. También reconozco que no nos preparamos para enfrentar este escándalo. Ahora, los candidatos no somos zen. ¿Cómo crees que es Castañeda en privado? Putea a la gente, se considera un mesías.
¿Qué pasó con la mujer policía?
Te cuento. Ella convocó a otros dos policías como testigos, y cuando a estos les preguntaron si hubo resistencia a la autoridad de mi parte respondieron que no. Luego, va al médico legista diciendo que tiene una contusión y el médico reporta que no tiene nada. Esta policía es una persona rara. Encima, su colega me quiso coimear. Ella pensó que yo la iba a empapelar, y decidió adelantarse y empapelarme.
¿Cuánto han afectado a tu carrera política estos escándalos?
Yo sé que me van a sacar esto en cara hasta que tenga 90 años (ríe). Sin embargo, en los siguientes meses, el votante tendrá que preguntarse: 1. ¿La imagen de Secada se reduce a esto o tiene otras aristas? 2. ¿Qué quiero para Lima?
¿Y cómo piensas manejar tu imagen de acá en adelante?
Yo no sé manejar mi imagen (risas). Yo soy como soy y digo las cosas como son, y así no ganas una elección ni en Finlandia. Sin embargo, desde que estos hechos ocurrieron, en la calle solo recibo manifestaciones de apoyo y me piden que no abandone la campaña. Es más, después de esto, Claudia me ha dicho: “Te apoyo, me meto en la campaña”, y si soy candidato ella estará a mi lado.
¿Qué genera en ti la postura de Raúl Castro?
Tampoco me sorprende. Hay diferentes formas de hacer política, y el PPC vive un proceso de renovación y va hacia una política menos vertical, menos autoritaria, que asume menos que tiene la verdad.
Castro representa lo anterior…
Claro. El PPC se tiene que modernizar: en organización, en propuesta, en trabajo con la gente. En una reunión Castro me dijo: “¿Tú no querías ir al Congreso? ¿Por qué ahora quieres el alcalde?”. “Porque me hicieron una propuesta, la consideré y me pareció realista”, le respondí. “Solo quiero que sepas que seré absolutamente imparcial”, replicó. Ahora, la imagen que ha dado el PPC durante estas semanas no es esa.
¿Y con todo esto seguirás en el PPC?
Ah, claro.
Marisol Pérez Tello te quitó su apoyo…
No he hablado con Marisol, pero su esposo es mi jefe de campaña. Imagino que quiere reducir el costo sobre su imagen, lo que me parece razonable (ríe).
¿Juntarse contigo daña la imagen de tus amigos?
Sí, pues, pero antes dijeron que los políticos tradicionales se veían mal porque yo me había metido en su territorio (ríe).
¿Qué otras cosas te van a sacar?
Que yo sepa, ya no hay más. Solo dicen que soy un ‘pegalón’ de mujeres.
En Lima, para desacreditarte, te tratan de gay o drogadicto…
Nunca he tenido experiencias homosexuales (ríe), y sobre si soy drogadicto, vuelvo a repetir, me puedo hacer sin problema un examen toxicológico.
¿Te ves de alcalde en 2015?
Cuando entré en la campaña, vi que había un espacio, y estuve por llegar a los dos dígitos, pero veamos lo que sucederá estos días con mi precandidatura: existe la posibilidad de que el PPC apoye a Salvador Heresi… si eso pasa, me van a tener que llamar con patrullero para que lo ayude, no porque tenga nada contra él sino contra lo que él representa, y las personas con las que está asociado. Heresi es ‘sobrinito’ del innombrable (se refiere a Álex Kouri), y el mayor error político de PPK.
¿Seguirás en la política?
Sí. Conozco bien este país y sé que la única manera de cambiarlo es con partidos políticos. Y, créeme, los golpes enseñan.
Aprenderás a ser candidato…
(Ríe). No es fácil con mi perfil. Acá los políticos son mentirosos, son hipócritas, se saben la última del repertorio cumbiambero… yo no soy así, pero puedo ser más profesional.
¿Cuánto te traiciona el ego?
Estoy orgulloso de haber estudiado donde estudié (la Universidad de Chicago), y esos estudios me los pagué a través de un préstamo. Y siempre he visto en ellos una herramienta para ayudar a la gente, mi vocación es de servicio.: si hubiera querido beneficiarme no hubiera estudiado Políticas Públicas.
AUTOFICHA
- La decisión de golpearme viene desde la revocatoria. El acuerdo entre Alan Castañeda y Kouri es que Alan sea el candidato en 2016 y Kouri vaya de vicepresidente.
- Castañeda será el candidato que el Apra apoyará en las municipales, pero los jóvenes apristas no confían en él, saben que no les va a dar nada.
- Mi familia respalda lo que hago y me pide que insista en la candidatura. Me arrepiento de haber peleado con mi pareja y no responder mejor las denuncias en mi contra.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.