Carlos Carlín,Habla.Babas
Desde la lamentable autoridad que me otorga el haber presentado durante casi un año, notas y más notas sobre el caso de Ciro Castillo, hoy me gustaría hacer un mea culpa y con ello proponer un llamado a la responsabilidad de todos los que tenemos acceso a medios y que ahora nos dedicamos a informar, con rigor (o sin él) sobre la triste muerte de la cantante Edita Guerrero. Creo que las circunstancias de su fallecimiento merecen una investigación, pero no somos los medios los llamados a juzgar ni a sentenciar a nadie, para eso existe la justicia, que por más famélica y corrupta que sea, es la justicia y no debería ser banalizada. El viudo de la cantante y presunto responsable de su muerte (gracias a una denuncia anónima) es repudiado por los fanáticos de Corazón Serrano, quienes han llegado a apedrear su casa sin pensar en los hijos de la pareja. No sé cuál será la verdad de la historia, pero ¿si el hombre es inocente? Hoy, cualquiera que pelee con su pareja puede aparecer en televisión denunciando agresiones, secuestros o intentos de asesinato; el único requisito es que uno de los dos sea algo conocido. Si la historia vende, no importa que sea verdadera, exagerada o inventada, pero olvidamos que en las historias vive gente a la que podemos destruir y que, con dificultad, intentará continuar con su vida, cuando la noticia ya no venda.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.