Juan José Garrido,La opinión del director
Las primeras horas de una crisis, casi en cualquier plano, son siempre vitales. No sólo permiten atender el problema sino identificar las motivaciones de los involucrados. No hay que tener un diploma en administración de crisis para entenderlo.
Por eso es que nos preocupamos, en Perú21, con los sucesos ocurridos durante las primeras horas del caso López Meneses. Como podrán leer en la historia desarrollada por nuestro periodista Óscar Libón, las formas y maneras de lidiar con la denuncia en las primeras horas fueron determinantes: impidieron, casi de manera contundente, descubrir lo que en verdad sucedía en la casa de Batallón Libres de Trujillo, la más famosa hoy en el distrito de Surco.
Lo que queda claro, como resumen y entre tantos otros, son dos cosas: en primer lugar, la calidad del periodismo desplegado por la periodista Cecilia Valenzuela, su equipo periodístico en WillaxTV y el diario El Comercio. Lejos de lo que hoy reclaman en las tiendas oficialistas y sus aliados mediáticos, la periodista brindó la información con el tiempo más que suficiente para que el exministro Pedraza actuara como debía: llamando a un fiscal y consiguiendo una orden judicial que permitiera allanar el inmueble lo antes posible.
En segundo lugar, la pobre actuación de los involucrados, desde el exministro Pedraza hasta, lamentablemente, el mandatario Ollanta Humala. En efecto, la respuesta del Ejecutivo fue asumir la dirección de la crisis (cuando, supuestamente, era un hecho delictivo) y desvirtuar a las instituciones del Estado diseñadas para lidiar con dichos casos.
Los resultados de este comportamiento saltan a la vista: la fiscal a cargo no encontró nada (casi dos días después de conocido el hecho por parte del exministro), se cortaron cabezas sin brindar claras explicaciones del caso, se neutralizó la oportunidad de una investigación seria por parte de los órganos competentes, la denuncia correspondiente por parte de la fiscalía y, por lo tanto, la penalización de los reales responsables. Esperamos que a partir de la historia que contamos se exploren nuevos espacios de investigación.
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