Ana María Romero-Lozada: "El 13 de agosto va a marcar todo un hito"

La rutina de Ana María Romero-Lozada comienza a las 4 y 30 de la madrugada, y termina muy tarde, pero no se siente cansada. Cuando la invitaron a formar parte del gabinete, no lo pensó dos veces. Se sintió contagiada por el entusiasmo del equipo. A los 68 años, esta socióloga que quiso ser monja se siente comprometida con el momento histórico que vive el Perú: para la ministra, el #NiUnaMenos es mucho más que una manifestación. Es un cambio. Un paso adelante.

¿Cómo afronta este regreso al Ministerio de la Mujer?
Me demanda mayor responsabilidad y, sobre todo, me entusiasma que los objetivos estén bien focalizados. En mi gestión anterior tenía un abanico de temas y responsabilidades muy variadas. Sumamente interesante, pero eran todos los programas sociales, además del Parque de las Leyendas. Nunca entendí por qué el Parque de las Leyendas.

Llega al ministerio en un contexto en el que las mujeres se cansaron de la violencia.
Así es. Es un momento en el que encontramos a la población realmente harta con la injusticia. Están alzando la voz para decir basta y no a la impunidad. No quiero quedarme en esta motivación que es legítima y que comparto desde todas las fibras. Quiero ir más allá, porque es una oportunidad para hacer un cambio. El 13 de agosto va a marcar todo un hito, no es la meta ni el final. Es el inicio de un camino diferente. Lo ocurrido con Lady Guillén y Arlette Contreras rebasó la paciencia.

Es muy difícil cambiar la mentalidad de esos peruanos que humillan, maltratan y matan a las mujeres. Hasta algunos policías lo hacen. ¿Se podrá realmente cambiar?
No creo que se cambie tanto como el Perú lo necesita, pero ojalá así sea. Lo que yo creo es que hay un punto de quiebre, un cambio importante. Estamos tomando consciencia de que es urgente desterrar la naturalización de la agresión. Cada vez hay más gente que reconoce que no tiene que ser así, hay más denuncias, los medios se han sumado (debo saludar el caso de Perú21 de retirar la Chica21). Esas iniciativas en absoluta libertad van a ir apareciendo. Somos un país libre, y es algo que debemos proteger. En esa libertad tenemos que guardar respeto por los derechos de todos. En un mundo moderno no puede haber conductas primitivas, como el machismo o la homofobia, y eso debemos desterrar.

Dicen que usted fue la ministra más conservadora del gobierno de Toledo.
Son opiniones equivocadas. No me considero conservadora. He leído las críticas y confío en que con el tiempo se darán cuenta de mi posición.

¿Está a favor de la unión civil?
A favor de la unión civil no matrimonial.

¿Matrimonio gay?
Unión civil no matrimonial.

Durante la gestión de Carmen Omonte se convocó a la comunidad LGBT para dialogar. ¿Continuará con este plan?
Por supuesto. Como parte de la transferencia, pedí información estricta sobre el tema. Se ha avanzado poco, pero nos comprometemos a seguir. Hay una mesa de mujeres lesbianas, hay un plan de trabajo y tenemos que hacerlo… Yo respeto la Constitución. Como demócrata, como peruana y como mujer, no puedo ir contra la Constitución, la cual señala expresamente que todos somos iguales. Es mi convicción como persona y mi obligación como servidora pública.

¿Pensó mucho antes de responder las indignantes declaraciones del cardenal Cipriani?
No tuve que pensar nada. Era una responsabilidad elevar la voz de los que represento y lo hice sin dudar. Siempre escucharán mi voz cuando los derechos de la población vulnerable sean violentados, venga de quien venga… No lo olviden.

El embarazo adolescente es un tema que también está en su agenda. ¿Qué piensa hacer?
No puede ser que cada día cuatro niñas, de entre 11 y 13 años, estén convirtiéndose en madres. La educación es fundamental, y el Estado debe apoyar decididamente. Tenemos que parar el abuso.

La edad de inicio sexual en el Perú es bastante temprana, ministra.
Sí, es la pura verdad. No olvidemos que se promovió el uso de la píldora del día siguiente para casos de violación y que hubo un dictamen del Tribunal Constitucional que prohibió la distribución. Tenemos que trabajar con el Ministerio de Salud.

¿Está de acuerdo con el uso de la píldora del día siguiente?
Estoy de acuerdo con que una persona bien informada tome decisiones libremente sobre su libertad física.

¿Y qué opina del aborto en casos de violación?
No hay una política de Estado, y en ese caso no puedo pronunciarme.

¿Está a favor o en contra?
Mi opinión personal no puedo revelarla, porque en este momento es una entrevista a una ministra de Estado.

Me temo que no está a favor.
(Risas).

Así decía el presidente Ollanta Humala cuando le preguntaban sobre la unión civil y hasta el final no se pronunció.
Hay una línea delgada entre la opinión personal y la opinión de Estado.

AUTOFICHA

• “Es cierto que quise ser monja y que me enamoré de un cura. Luego los dos renunciamos y fuimos por diferentes caminos. Tengo 68 años, soy soltera, he trabajado cuatro años en la gestión pública durante el gobierno del presidente Alejandro Toledo y ahora regreso”

• “Soy un producto neto de los 70. Estaba segura de que cambiaría el mundo. Solo necesitaba el espacio y la oportunidad, y no encontré otro espacio que la congregación religiosa. Pasé dos años, casi tres, en Chile. Aprendí mucho y decidí mi camino”.

• “Le deseo la mejor de las suertes al presidente Alejandro Toledo. Fue un gobierno con muchos aciertos y me siento orgullosa de haber sido parte y de no tener manchas en mi trabajo. Espero que el presidente Toledo supere esos problemas, por el bien de la imagen del país”.

Por Esther Vargas (@esthervargasc)