El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, habló sobre acusaciones de que Estados Unidos había espiado a líderes de su país y advirtió hoy que ese tipo de actividad era inaceptable y no tenía lugar en la estrecha relación entre los aliados.
Documentos filtrados el viernes por el excontratista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de Estados Unidos Edward Snowden mostraron que ese organismo y su contraparte británico, GCHQ, h*abían apuntado en 2009 a direcciones de correos electrónicos del entonces primer ministro israelí Ehud Olmert* y monitoreado e-mails de funcionarios de defensa.
“Con respecto a lo publicado en los últimos días, he pedido un examen del asunto”, dijo Netanyahu en una referencia clara al supuesto espionaje.
No dio detalles sobre si Israel planeaba pedirle aclaraciones a Washington. “En las relaciones cercanas entre Israel y Estados Unidos, hay cosas que no deben hacerse y que no son aceptables para nosotros”, dijo el primer ministro israelí, en declaraciones a los legisladores de su partido Likud de centroderecha.
El domingo, varios miembros del gabinete y legisladores israelíes dijeron que la revelación de que Estados Unidos espió al Estado judío era una oportunidad para presionar a Washington para que liberara al agente israelí detenido Jonathan Pollard.
Pollard, un exanalista de inteligencia de la Marina estadounidense, fue condenado a cadena perpetua en 1987 en Estados Unidos por realizar espionaje para Israel.
Una sucesión de presidentes estadounidenses han rechazado los pedidos israelíes para su indulto.
En lo que parecía ser un intento por calmar la situación, Netanyahu dijo el domingo que Israel había buscado constantemente la liberación de Pollard y no necesitaba ninguna “ocasión especial” para discutir su caso con Washington.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.