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Brasil: Juez aceptó libertad provisional para 'Edinho', el hijo de Pelé

El exportero esperará en libertad a que un tribunal superior se pronuncie definitivamente sobre la condena de 33 años por lavados de activos.

Edinho, el hijo de Pelé, en libertad provicial mientras espera condena por 33 años de prisión. (Difusión)
Edinho, el hijo de Pelé, en libertad provicial mientras espera condena por 33 años de prisión. (Difusión)

Un juez del estado brasileño de Sao Paulo aceptó hoy la petición del exportero Edson Cholbi do Nascimento, conocido como Edinho e hijo del exfutbolista Pelé, de esperar en libertad a que un tribunal superior se pronuncie definitivamente sobre la condena a 33 años por lavado de dinero.

El magistrado aceptó el recurso presentado por los abogados del exfutbolista en el que argumentan que Edinho, preso desde el pasado martes, no representa un riesgo para la sociedad ni pretende huir del país.

Como el respectivo recurso de hábeas corpus tan solo podrá ser enviado al juez de ejecuciones penales el próximo lunes, el exportero tendrá que permanecer preso hasta entonces.

El hijo de Edson Arantes do Nascimento fue detenido en la ciudad de Santos casi un mes y medio después de que otro juez lo condenara a 33 años de prisión por el delito de lavado de dinero* procedente del narcotráfico.

Edinho obtuvo entonces el beneficio de la libertad condicional mientras espera que un tribunal superior se pronuncie sobre la condena, aunque fue obligado a entregar su pasaporte como garantía de que no abandonaría el país.

Como los abogados no entregaron el pasaporte y alegaron que el exportero del club Santos lo había perdido, el juez responsable por el caso ordenó la semana pasada el inmediato encarcelamiento del condenado.

El caso por el que fue juzgado Edinho, uno de los siete hijos de Pelé, se remonta a 2005, cuando comenzó un proceso en el que fue acusado de asociación al tráfico de drogas.

En su momento, Edinho negó todas las acusaciones aunque admitió que tenía problemas con las drogas, pero solo como consumidor, y que le debía dinero a un amigo, quien fue identificado como el jefe de una banda de narcotraficantes que actuaba en Santos.

El juez de primera instancia responsable del proceso absolvió al exfutbolista de las acusaciones de tráfico de drogas y apoyo al tráfico de drogas, pero lo terminó condenando por el delito de lavado de recursos de procedencia ilegal.


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