El primer ministro belga, Elio Di Rupo, no tuvo reparos en besarse con un travesti en una ceremonia transmitida en vivo para premiar a los mejores deportistas de su país.

Di Rupo reclamó un beso “las damas de honor” de la gala y el humorista Stany Crets, vestido de mujer, se lo tomó al pie de la letra. En respuesta, las risas del público estallaron, informó el diario español El Mundo.

El político fue el encargado de dar el galardón al ciclista Tom Boonen.

Di Rupo es el primer líder de la Unión Europea que reconoce abiertamente su homosexualidad y goza de gran popularidad entre los belgas porque conformó un Gobierno estable en su país, después de más de un año de desacuerdos entre los partidos belgas.

En 1996 estuvo envuelto en un supuesto caso de pedofilia, que fue archivado en 2001. También viste de forma particular –con una chaqueta y una corbata ‘michi’– y es asiduo concurrente de “locales de ambiente” en Bruselas.