Giancarlo Vacchelli,Congresista
Autor: Gonzalo Pajares.
gpajares@peru21.com
Giancarlo Vacchelli se siente a gusto en el Congreso porque dice que está trabajando a favor de los discapacitados. Acaba de aprobarse su proyecto para que los padres de menores discapacitados tengan beneficios laborales y puedan disponer de hasta dos semanas al año para atender a sus hijos por cuestiones médicas. Confía en que esta iniciativa se convierta en ley. De este y otros temas trata esta charla.
¿Cómo te sientes en el Congreso de la República?
Contento, he hecho muchas cosas a favor de los discapacitados. Trabajo para ellos con el objetivo de conseguir una verdadera inclusión para este sector de la población. Más allá de los objetivos que tenemos en el fujimorismo, es importante darle al colectivo de los discapacitados una mejor calidad de vida.
La impresión que uno tiene del Congreso no es de las mejores, uno siente que es una institución muy imperfecta…
Tiene errores como cualquier institución, pero, como todo en la vida, tiene buenos y malos representantes; de hecho hay malos congresistas, hay corruptos; congresistas que no sirven al país sino que se sirven, pero todo esto no descalifica a la institución, porque existimos congresistas que trabajamos, que pensamos en el Perú. Dicho esto, el Congreso es una institución digna, de la que yo me siento orgulloso, pues es el pulmón de la democracia, pero necesita difundir las cosas buenas que hace y, en esto, la prensa no nos juega a favor porque solo divulga los escándalos: por ejemplo, a mi colega Urtecho le dicen ‘el mochasueldos’ (risas). La prensa debe ser incisiva en buscar lo bueno y en buscar lo malo.
Te ubicas en el lado de los buenos…
(Ríe). De mí podrán decir muchas cosas, les puede o no gustar que sea fujimorista, podrán discrepar sobre mi participación en los debates, pero nunca podrán decir que estoy metido en un acto de corrupción: mis manos están limpias, yo no estoy en el Congreso para servirme del Estado.
Tu problema es que defiendes a Fujimori, un corrupto…
(Ríe). No, pues, no hablemos de eso. Que haya sido condenado no significa que, en verdad, sea corrupto. Volviendo a mí, mi gestión es inmaculada.
¿Cómo evalúas el accionar del fujimorismo como partido de oposición?
Lo estamos haciendo bien. Somos una oposición constructiva, responsable, que le ha puesto el freno al Gobierno en su intento de volver a ‘La Gran Transformación’. La población sabe que somos la única y real oposición que tiene el nacionalismo, el Gobierno.
Disciplinados son, pero sale Tubino y lanza frases agresivas. ¿Estás de acuerdo con su posición acerca de la unión civil entre homosexuales?
Voy a hablar a título personal. Yo respeto, quiero y admiro al almirante Carlos Tubino, quien es mi amigo, pero en este tema discrepo respetuosamente con él. Yo estoy a favor de la unión civil entre gays, porque me parece que un país que busca enrumbar hacia el desarrollo, que busca convertirse en una sociedad moderna y abierta, tiene que dar este tipo de señales. No estoy de acuerdo con el matrimonio gay ni con que adopten niños. Si esta ley da paso a esto, es pura especulación, pero la propuesta de Bruce, puntualmente, me parece favorable. ¿Por qué una pareja de homosexuales no va a tener acceso al Seguro Social, a heredar? Mal que bien, la de los homosexuales es una unión que debe ser respetada y reconocida por la ley y el Estado, pues su función es velar por los derechos de todos sus ciudadanos, independientemente de sus prácticas sexuales.
¿Y la moral? ¿Y la religión?
Yo respeto a la Iglesia Católica, entiendo su posición. Seríamos ingenuos si pensábamos que iba a salir a aplaudir esta iniciativa; la Iglesia debe seguir sus convicciones, así como los promotores de la unión civil deben seguir las suyas. Dicho esto, yo respeto la posición de la Iglesia, pero yo tengo la mía, y este tema trasciende el tema de la religión, es un tema de derechos. Ah, y ojo, yo no soy homosexual (ríe).
¿Extrañas la TV?
Todo en la vida tiene su ciclo, y yo cumplí el mío en la TV. Fue un momento maravilloso de mi vida, pero hoy estoy contento en el Congreso, sirviendo a mi país y trabajando por la gente, pero nunca perderé mi vínculo eterno con el fútbol.
Hablemos de fútbol…
Estuve en el estadio en el Perú-Uruguay, y hasta ahora me duele en el alma la eliminación del Mundial. ¡Quiero vivir la sensación de la fiesta mundialista! Markarián es un buen entrenador, pero no me gustó cómo se despidió después de las derrotas con Uruguay y Venezuela. Salir a decir que el problema es estructural es evadir su responsabilidad. Es verdad lo que dice, pero debemos tomar en cuenta dos aspectos: 1. Sabía qué pasaba acá e, igual, tomó el reto. 2. En el 97, con Oblitas, la situación era la misma, pero nos quedamos fuera del Mundial por diferencia de goles. Es decir, acá lo que falla es el compromiso del plantel, y ese es nuestro problema: no haber encontrado un técnico capaz de comprometer a los jugadores.
AUTOFICHA
- Estuve en el estadio en el Perú-Uruguay, y hasta ahora me duele en el alma la eliminación del Mundial. ¡Quiero vivir la sensación de la fiesta mundialista!
- Acá lo que falla es el compromiso del plantel, y ese es nuestro problema, no haber encontrado un DT capaz de comprometer al equipo.
- Trabajo por el deporte. Presenté un proyecto de ley para que las empresas privadas que inviertan en infraestructura deportiva tengan beneficios tributarios.
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