Es solo una percepción

Juan José Garrido,La opinión del director
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El gobierno le ha vendido la idea al ministro Urresti sobre sus virtudes como sheriff y, por consiguiente, sobre su popularidad. En el mundo de las percepciones creerán que, si el primer interesado se la cree, pues se la podrán creer otros. Por primera vez en lo que va del gobierno nacionalista parecen convencidos de haber encontrado al sheriff perfecto, y tal vez por ello han minimizado cualquier acusación o cuestionamiento.

La verdad es todo lo contrario (ver Pulso Perú, Julio 2014). Primero, en efecto, se requería de un cambio en la cartera: 49% de acuerdo frente a 28% en desacuerdo; no será una gran diferencia, pero sí la suficiente para considerar el cambio. La segunda realidad es que 54% de los encuestados creen que las cosas, con el ministro Urresti, seguirán igual (frente a un optimista 26%).

Es en la tercera y cuarta donde, en efecto, viene lo peor; después de tanta alharaca y tanto despliegue, al ministro Urresti lo conocen el 15% de los entrevistados; un 84% no lo reconoce si se lo cruza en la calle. Peor que eso, 45% creen que la acusación por el caso Bustíos sí lo inhabilita para el cargo (frente a un increíble 31%).

Finalmente está la encuesta de IPSOS donde el ministro sale con 25% de aprobación frente a un 51% de desaprobación. De nuevo, la diferencia no será abismal, pero tampoco es un cheque en blanco ciudadano.

Dos reflexiones. La primera es sobre la idoneidad del Sr. Urresti para el cargo. Si el gobierno cree que ya pasó la peor parte, se equivoca. La segunda es acerca de la percepción ciudadana de inseguridad y la preferencia por algunos hampones sobre otros. Nos parece muy bien que le caigan con todo el peso a las bandas del norte y sur, a San Jacinto y a centros de abastecimiento de drogas. No obstante, la sensación es que a los “allegados” no se les está buscando. ¿Nada aún de Martín y Rodolfo?